«Queremos un trato más cercano con la ciudadanía»

El capitán Juan Antonio Zapata, natural de Fuente de Cantos, es el máximo responsable de la Compañía de la Guardia Civil de Trujillo, que engloba a 29 poblaciones. Llegó a este puesto en junio, después de estar destinado en el País Vasco, en donde desempeñó diferentes funciones. En su nuevo destino, ya ha mantenido conversaciones con los mandatarios de las poblaciones más importantes de la zona, como Trujillo, Miajadas y Guadalupe. Asegura que la acogida ha sido «extraordinaria». En este tiempo, le ha tocado coordinar varios servicios especiales, en colaboración con algunos municipios, como en la festividad del patrona de Extremadura o con motivo de las fiestas trujillanas.

Uno de sus principales objetivos es que la Guardia Civil tenga un trato «más cercano» y una relación más directa con la ciudadanía. Este hecho hará que se tenga una mayor confianza en este cuerpo de seguridad, lo que provocará que aumente la colaboración de los vecinos. Zapata la considera importante para que las personas aporten información o tramiten las denuncias necesarias que puedan apoyar a las investigaciones, ya que «hay cosas que se nos escapan». Reitera que los vecinos que lleguen al cuartel se los atenderá y escuchará. A pesar de ello, matiza que esta Compañía tiene sus medios y personal para intentar resolver los casos. También destaca la cooperación que debe existir con la Policía Local. De hecho, ya ha mantenido reuniones con el subinspector jefe de los agentes trujillanos, José Luis Bermejo, para coordinar servicios.

Este capitán de la Guardia Civil apunta que la idea también es que se mantengan encuentros con los colectivos que organicen eventos en la zona, con el fin de conocer sus necesidades. Así se hizo hace unas semanas con la asociación Plataforma Sin Barreras, con motivo de sus jornadas sobre discapacidad. También se han mantenido conversaciones con el Club Taurino Trujillano, ya que ahora desarrolla su semana cultural. Con estas actuaciones, Juan Antonio Zapata pretende hace saber a estos grupos que«nos pueden explicar sus inquietudes», además de solicitar la presencia de la Guardia Civil por otros conductos.

Aunque el capitán no ha querido entrar en cifras sobre el número de delitos en la zona, considera que es un territorio tranquilo. A pesar de ello, su intención es la de intentar mejorar los resultados.

A preguntas sobre el futuro adecentamiento del cuartel de Trujillo, reconoce que tiene muchos años y que puede necesitar una reforma. Sin embargo, matiza que se viven tiempos de austeridad. Por ello, cree que cuando se tenga disponibilidad, se arreglará.