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Un fármaco específico para los pacientes de mielofibrosis

Unas 600 personas al año son diagnosticadas de esta enfermedad rara, que podrán ser tratadas desde ahora con Jakavi

Daniel Roldán

Miércoles, 22 de abril 2015, 12:56

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Pérdida de peso, sudoración extrema que obliga a cambiar las sábanas por la noche, crecimiento desmesurado del bazo (esplenomegalia), dolores en los huesos, anemia o un cansancio tan intenso que uno se siente agotado aunque esté sin hacer nada. Son algunos de los síntomas de la mielofibrosis, una enfermedad rara de la que solo se detectan unos 600 casos al año en España. Una de esas dolencias a la que hasta ahora solo se ponían 'parches', es decir, medicamentos que funcionaban con otras dolencias y que se usaban con estos enfermos para intentar mitigar los síntomas. Por ejemplo, los tratamientos contra la anemia.

Pero la situación de estos pacientes ha cambiado. Después de dos años de negociaciones, Sanidad ha aprobado el uso de Jakavi (ruxolitinib), el primer fármaco específico para esta enfermedad. "No la cura, pero mejora todos los síntomas", ha apuntado Francisco Cervantes, doctor del Servicio de Hematología del Hospital Clínic de Barcelona. La mielofibrosis es una enfermedad de la médula ósea que se desarrolla cuando una de esas células madre sufre un conjunto de mutaciones que da lugar a una multiplicación descontrolada de estas células y a un funcionamiento anormal de las mismas.

La única solución a esta enfermedad es el trasplante alógeno de células madre. "Pero la mitad de los pacientes tienen más edad (65 años) de la recomendada para esta operación", explica el doctor Cervantes, quien ha señalado que este procedimiento solo es aplicable al 10% de los enfermos. De este modo, la aparición de este medicamento elaborado por Novartis da un salto cualitativo en la lucha contra esta enfermedad rara.

"Jakavi actúa directamente en el mecanismo subyacente de le mielofibrosis, reduciendo de forma significativa la esplenomegalia y mejorando los síntomas con independencia del estado de mutación del gen JAK2 (regulador de la producción de células sanguíneas y cuyo cambio aparece en estos pacientes), del subtipo patológico o de cualquier tratamiento previo", apunta el doctor Cervantes. Un fármaco que no es recomendable para aquellos pacientes con mucha anemia, pero menos sudoración y crecimiento del bazo. "Los efectos se ven enseguida, a las 48 horas", ha comentado el médico del Clínic.

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