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Un cámara graba la entrada del Hospital Carlos III.
Las próximas tres semanas, claves para el estado de salud de la sanitaria contagiada con ébola

Las próximas tres semanas, claves para el estado de salud de la sanitaria contagiada con ébola

Tratan a Teresa Romero con un suero extraído de Paciencia Melgar, la monja superviviente al ébola

Daniel Roldán

Martes, 7 de octubre 2014, 12:02

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El futuro de Teresa R. R., la auxiliar de enfermería contagiada por el ébola, está en manos del plasma extraído de la monja ecuatoguineana Paciencia Melgar, compañera de fatigas del fallecido Miguel Pajares en el hospital San José de Monrovia (Liberia). La respuesta de Teresa al tratamiento dependerá de la cantidad de virus que tiene en el cuerpo y del estado de su sistema inmune. El plazo máximo para saber los resultados es de 21 días, el mismo tiempo que se aplicó, por ejemplo, a Juliana Bonohá, la compañera de Pajares que fue repatriada en agosto y que sólo tenía malaria.

Paciencia Melgar fue la única del equipo de médicos y enfermeras que contrajeron el ébola en el centro de la Orden de San Juan de Dios que superó la enfermedad. Pertenece a ese escaso 50% que se salva de la muerte. Ahora, los médicos han extraído plasma de su cuerpo para que actúe como un antibiótico natural y se lo han inyectado a la técnica sanitaria, según confirmó ayer la secretaria de la sección sindical de Comisiones Obreras en el hospital La Paz, Esther Quiñones.

Este sistema, no testado como un fármaco de uso común, se planteó en los casos de los dos misioneros españoles (Miguel Pajares y Manuel García Viejo), aunque con la gran diferencia de que toda la detección y el tratamiento se realiza en un hospital perfectamente equipado. "Tenemos varias opciones terapéuticas que se empezaron a aplicar desde el lunes", se limitó a señalar Mercedes Vinuesa, directora general de Salud Pública, Calidad e Innovación, en el Congreso de los Diputados. Horas más tardes, el responsable de la unidad de enfermedades infecciosas del hospital Carlos III, José Ramón Arribas, fue algo más concreto: "Tenemos a nuestra disposición suero hiperinmune de paciente convaleciente y también tenemos un antiviral que tampoco se ha probado en humanos llamado favipiravir. Sí que ha tenido actividad en animales pequeños". No obstante, Vinuesa alertó que este plasma ofrece resultados "muy diversos" y que no es del todo fiable; sobre los sueros, aseguró que los países y la industria se prestan información y productos.

La sanitaria se presentó a una oposición

  • La auxiliar de enfermería infectada por el virus del ébola participó el 27 de septiembre en la prueba de oferta pública de empleo, dos días después de tener el último contacto con la habitación del misionero fallecido en el Hospital Carlos III.

  • Sindicatos representados en la Mesa Sectorial de Sanidad detallaron en rueda de prensa que la enfermedad "no parece ser contagiosa hasta que no hay síntomas" y cuando la paciente hizo la prueba selectiva no los tenía. Los primeros síntomas aparecieron el 30 de septiembre.

  • "Esa gente (los opositores) tiene que estar tranquila", señalaron, después de remarcar que no está demostrado científicamente que el contagio se pueda producir a las 48 horas del contacto que ha generado la infección.

  • El pasado 27 de septiembre se celebraron las pruebas de oposición para auxiliares de enfermería en la Comunidad de Madrid, que contó con 28.084 solicitudes.

Pocas explicaciones más ofreció, para desesperación de los grupos de la oposición, quien solicitó todos los datos sobre el primer caso de ébola fuera de África y la comparecencia inmediata de la ministra de Sanidad, Ana Mato. Tras ofrecer una profusa narración sobre el nacimiento y la propagación de las dos cepas del ébola (tanto en África occidental como en la República Democrática del Congo), de destacar la coordinación y las reuniones de altos cargos con la OMS y los ministros de la Unión Europea, la directora general de Salud Pública solo ofreció pinceladas sobre el caso de la mujer infectada.

Esta profesional estuvo con Manuel García Viejo dos veces en tres días: en la primera ocasión, para cambiar un pañal al misionero; en la segunda, para atender al cadáver del religioso. "Se está investigando el mecanismo de infección", apuntó, antes de confirmar que entró con el "equipo correcto" y que se mantuvieron los protocolos de seguridad. Tampoco dio luz sobre las personas con las que estuvo en contacto y aseguró que se está trabajando de forma intensa en identificar a todas las personas con las que estuvo.

Su marido, Javier L. R., señaló que "sé que mi mujer está en las mejores manos. Sé que también a nivel nacional como internacional se esté haciendo todo lo posible por ella. Pero no estoy tan seguro que se esté haciendo lo mismo con mi perro", dijo ayer en el programa 'Más vale tarde' de LaSexta.

En estudio

Otras tres personas están aisladas en la sexta planta del hospital Carlos III para determinar si también están infectadas por el ébola. Dos son los casos que más preocupan a los responsables sanitarios, según comentó el doctor Francisco Arnalich, jefe de servicio de Medicina interna del hospital de La Paz: el marido de la técnica sanitaria, Javier L. R., y un ingeniero español que regresó de Nigeria y que presentaba una temperatura alta. La tercera persona en cuestión es una enfermera que también trabajó en el equipo que atendió al padre Manuel García Viejo y que ingresó por unas fuertes diarreas, pero cuyos resultados, conocidos este martes por la tarde, dieron negativos así que hoy mismo se podría ir a casa.

Por otra parte, el director gerente del complejo hospitalario de La Paz, Rafael Pérez Santamaría, delimitó en 22 las personas que están siendo sometidas a un seguimiento por haber tenido contacto con la auxiliar sanitaria. Una profesional que ha asegurado que siguió todas las normas de seguridad. "Estamos revisando el procedimiento pero siempre cabe la posibilidad de que haya habido algún imprevisto. Lo principal es atender a la paciente, pero ha sido una desagradable sorpresa", indicó Pérez Santamaría. A este número, hay que añadir los 30 profesionales que ya estaban en alerta tras haber participado en el equipo que atendió al misionero leonés finado el 25 de septiembre.

El director gerente del complejo hospitalario de La Paz defendió la actuación de los profesionales sanitarios y descartó que hubiera sido necesario ingresarla días antes. "No tenía síntomas entonces. Es más, incluso si se le hiciera la prueba podía haber salido negativa", comentó Pérez Santamaría, quien resaltó que la paciente no se marchó de la Comunidad de Madrid después de cogerse sus vacaciones tras el fallecimiento del padre leonés.

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