Nueve de cada diez universitarios que sufren 'sexting' dejan la carrera

Sirva un dato de ejemplo. Nueve de cada diez estudiantes que sufrieron 'sexting' en internet o redes sociales –difusión digital de fotografías o grabaciones suyas de contenido sexual sin su consentimiento– acabaron por abandonar los estudios. En realidad la proporción es mayor. Alcanza prácticamente todos. Fue un 'shock' determinante para dejar la carrera para el 93%, según las respuestas de los afectados a los expertos del grupo de Aprendizaje Escolar, Dificultades y Rendimiento Académico (Adir), que realizaron entrevistas específicas a 1.600 universitarios de diferentes cursos y ramas de conocimiento.

Un principio que se repite en las investigaciones sobre esta lacra centradas en escuelas e institutos también resulta válido para los alumnos de los campus. Uno de los factores que más pesa a la hora tomar la decisión de abandonar los estudios superiores es haber sufrido 'ciberbullying', que acaba por provocar una fractura traumática e insoportable de la relación del universitario con tus compañeros de clase o de facultad. Por eso, los ataques que más activan la decisión de dejar el campus o la escuela, además del ultraje del 'sexting', son el vacío social y las campañas digitales para destruir su reputación.

La cata del grupo Adir comprueba que el ciberacoso afecta a un alto número de universitarios. Un tercio de los entrevistados confesó haber sufrido en redes o chat digitales la difusión indeseada de imágenes suyas de contenido sexual. Pero es que un porcentaje muy similar también padeció la traumática experiencia de que alguien suplantase su identidad en internet y se dedicase a propagar comentarios con la intención evidente de dejarle en mal lugar y perjudicarlo.

En porcentajes menores, abundan otras tres clases de ciberacoso. El 4,5% fueron objeto de burlas públicas o de la inclusión en contenidos ofensivos e insultantes en las redes sociales y, de forma especial, en los grupos de mensajería o conversación. Otro 4,1% sufrió comentarios de cariz sexual no deseados en espacios digitales y algo más del 3% sintieron directamente la ignorancia, exclusión o incluso el vacío premeditado de sus compañeros en los chat o las redes.

Esta relación directa del 'ciberbullying' con el abandono de los estudios universitarios es una agravante para un problema académico ya muy serio de los campus españoles, que incluso llevó al Gobierno a realizar recientemente una investigación de las razones por las que algo más de uno de cada cinco alumnos que se matriculan en una facultad termina por dejar los estudios.

Los autores del informe recomiendan a las autoridades políticas y a los responsables de las universidades al menos dos tipos de actuaciones paliativas. Por un lado, consideran que se necesita una concienciación e intervención previa contundente contra el acoso escolar en los colegios e institutos, porque ya es muy difícil corregir esta violencia y esta actitud corrosiva cuando los jóvenes pisan los campus. Lo segundo, urgen a que las universidades pongan en marcha iniciativas y mecanismos para sensibilizar a los alumnos contra la crueldad del acoso y, sobre todo, para acompañar, apoyar y recuperar a las víctimas.

Investigadores de UNIR publicaron esta semana otra investigación sobre el 'ciberbullying' en adolescentes. Concluyeron que el acoso escolar digital está «infravalorado» y bastante más extendido de lo que parece. Siguieron a 1.142 adolescentes durante 13 meses y descubrieron que solo el 6%, la mayoría chicas, padecía ciberacoso constante, pero que en ese tiempo un 25% que no había sido víctima antes empezó a sufrir ataques. Si se mantienen las investigaciones en el tiempo hasta uno de cada cuatro chicos termina ciberacosado.