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Ginés García Millán y Paco Tous encarnan a Adolfo Suárez y Antonio Tejero en la película 'El 23-F'. / Archivo
Adolfo Suárez en la ficción
aDIÓS AL PADRE DE LA TRANSICIÓN

Adolfo Suárez en la ficción

Actores, directores, escritores y documentalistas han tratado de retratar el liderazgo histórico de una figura clave en la Transición española

ROSARIO GONZÁLEZ

Miércoles, 26 de marzo 2014, 16:04

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Desde su infancia en Cebreros (Ávila) hasta sus primeros pasos en política y los momentos históricos que vivió el país bajo su Presidencia, la vida de Adolfo Suárez ha suscitado el interés de actores, directores, escritores y documentalistas, que han tratado de retratar al primer presidente de la España democrática en el cine, la televisión, la novela y las tablas del teatro en trabajos que, en su mayoría, coinciden en destacar la figura providencialista de la Transición y su liderazgo histórico.

Para darle vida, actores como el fallecido José Sancho, Pedro Ruíz o, más recientemente, Ginés García Millán y José Manuel Seda, han asumido el reto de vestir los hábitos del político abulense para reflejar lo más fielmente posible el legado histórico que deja el mandatario. Algunos de ellos poseían recuerdos muy lúcidos sobre la etapa histórica que representaron en la ficción, como Pepe Sancho (Valencia, 1944), que reconoció en alguna entrevista haber estado metido en política durante aquella época, participando por ejemplo en la primera huelga de actores, aunque rechazaba las etiquetas que lo afiliaban a uno u otro movimiento. Solo reconoció haber coincidido en su origen con las ideas del socialismo, un barco del que, aseguraba, se bajó al vislumbrar que los revanchismos germinaban igual a uno y otro lado.

En el caso de Pedro Ruiz (Barcelona, 1947), autodefinido como rebelde y a la contra, siempre ha mostrado su escepticismo sobre la Transición, una época en la que, ha afirmado en alguna ocasión, se pasó de la dictadura a la democracia pero no de la democracia a la decencia. Para Ginés García Millán (Murcia, 1964), el reto de interpretar a Suárez se incrementaba al ser una figura compleja, inabarcable y que creía profundamente en lo que hacía". El actor tenía apenas 16 años cuando Tejero irrumpió en el Congreso el 23 de febrero de 1981 y, al regresar a casa, supo que algo gordo había pasado cuando se encontró a su abuelo limpiando la escopeta. Con el paso del tiempo, recuerda del político una imagen de buen presidente que se ha engrandecido con el tiempo.

El más reciente en ponerse los zapatos de Suárez ha sido José Manuel Seda, (Sevilla, 1968), el más joven de todos ellos. El actor sevillano, que recrea en El encuentro la reunión de Suárez con Carrillo que dio lugar a la legalización del Partido Comunista, destaca sobre todo la necesidad que existía en la época y también ahora de diálogo entre las figuras políticos, una demanda que comparten tantos ciudadanos hastiados de ver peleas de portera en sus representantes públicos.

Cine, televisión y teatro

Por orden cronológico, su primera aparición en la ficción se encuentra en la novela de Fernando Vizcaíno Casas Y al tercer año, resucitó, en cuyas páginas convivía con otros personajes reales de la Transición. En 1981, la novela fue llevada al cine y el actor José Sancho fue el encargado de dar vida en la pantalla a Suárez. Un año después, en 1982, sería el turno del actor Pedro Ruiz, que daría vida al personaje en la película humorística El gran mogollón, aunque en este caso realizando una parodia de la figura de Suárez.

En televisión, Antena 3 emitió en enero de 2010 Adolfo Suárez, el presidente, una tv-movie que repasaba su figura en dos partes, una que narraba su juventud y su llegada ala Presidencia y una segunda que abordaba sus años de Gobierno hasta el 23F. Para darlo vida eligieron a Ginés García Millán, actor curtido en televisión, cine y teatro.

La cadena acompañó su estreno con el reportaje Suárez, un político para la historia, un repaso por su vida desde su infancia abulense hasta sus primeros pasos políticos, incluyendo testimonios de sus compañeros de escuela y de su equipo de fútbol, el Dinamita, así como de su etapa universitaria, sus primeras novias e incluso su temprana vocación por el sacerdocio. En la parte política, el reportaje recoge momentos claves como su relación con el general Francisco Franco o su primer encuentro con Don Juan Carlos, todavía Príncipe, con quien llegó a desarrollar una fuerte amistad, así como su llegada a la Presidencia, una vocación que incluso dejaba plasmada en los libros que regalaba a sus amigos de la facultad con una dedicatoria que resultó premonitoria: De Adolfo Suárez, futuro presidente del Gobierno. El reportaje se completaba con el testimonio de líderes contemporáneos como Santiago Carrillo, Felipe González o José María Aznar, así como compañeros de partido.

También la serie de Televisión Española Cuéntame como pasó recoge en sus últimos capítulos la llegada de Adolfo Suárez a la política e incluso su interacción con los protagonistas de la serie. De hecho, los guionistas decidieron buscar un equilibrio político en la familia Alcántara de manera que cada miembro votara a un partido. Así, Antonio Alcántara votaría a Suárez incluso se plantea ingresar en el partido UCD-, al igual que la abuela, que duda entre el político abulense o Fraga, las opciones más conservadoras,. Los más jóvenes apostarán por el PSOE, al igual que Mercedes, que descoloca con su decisión a Antonio y, por último, Miguel, que decide dar su apoyo al PCE como muestra del caleidoscopio político de la época. Asimismo, en diciembre de 2013, la cadena pública emitió también un documental sobre su etapa como presidente con motivo del 35 aniversario de la Constitución Española.

Hace apenas un mes, el Teatro Español estrenaba El Encuentro, una obra de teatro en la que se recoge el histórico encuentro entre el ya presidente Adolfo Suárez interpretado por José Manuel Seda- y el líder comunista Santiago Carrillo interpretado por Eduardo Velasco- el 27 de febrero de 1977, una reunión que hizo posible la legalización del Partido Comunista y de la que apenas trascendieron algunas frases, como el Cuantas horas de sueño me ha quitado usted que Suárez le dirigió a Carrillo. Una obra que, según su director, pretendía ser una invitación al diálogo a la clase política.

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