La Diputación de Cáceres propone una ruta por las Fiestas de Interés Turístico
ELEMENTOS CULTURALES Y TURÍSTICOS. ·
Más valiosos del territorioLas fiestas y celebraciones populares de la provincia de Cáceres suponen para este territorio extremeño un valioso patrimonio cultural. Así, a lo largo de todo el año, numerosos municipios se engalanan para seguir honrando sus tradiciones, que mantienen vivo su legado, a través de las declaradas Fiestas de Interés Turístico (FIT) –ya sean de carácter regional, nacional o internacional– por su valor cultural, histórico o artístico especial y original, así como por su capacidad para atraer a visitantes y promover el destino.
Por todo ello, la Diputación de Cáceres mantiene desde hace años un compromiso firme con la promoción y sostenibilidad de las FIT, a las que considera «uno de los elementos culturales y turísticos más valiosos del territorio» y que no solo representan tradición y patrimonio, «sino que se han convertido en recursos turísticos de primer orden que generan actividad económica y cohesión social en los municipios».
Durante este 2025, la Diputación ha proporcionado ayudas por valor de 195.000 euros para apoyar estas festividades, consolidando así su apuesta por mantener viva una parte esencial del patrimonio inmaterial de la provincia. Así, las Fiestas de Interés Turístico Internacional han recibido una dotación económica de 25.000 euros y las de Interés Turístico de Extremadura y Nacional, 5.000 euros.
Con estas ayudas, la institución provincial persigue «fomentar y promover la actividad económica de los municipios y de sus comarcas, poniendo en valor los recursos endógenos, así como la divulgación de la gastronomía de la provincia, para el equilibrio social y económico, la mejora de las condiciones de vida de la ciudadanía y promoción turística de las FIT».
Asistencia a ferias
Además, dentro del Plan de Promoción Turística para la provincia se incluye la asistencia a ferias y eventos especializados, como el Festival de la Máscara Ibérica (Portugal) o el Festival de la Máscara en Zamora, ambas festividades ya consolidadas y que cuentan cada año con presencia de fiestas cacereñas.
El Encuentro de Oportunidades en el Medio Rural de la provincia de Cáceres organizado por la Diputación Provincial, conocido como 'Jato', se convierte también en un punto de encuentro para estas festividades y otras destacadas de la provincia, que ofrece cada año un desfile para seguir dando a conocer la filosofía, variedad y colorido de las fiestas cacereñas más arraigadas.
Por tanto, esta ruta propone un recorrido por algunas de estas celebraciones emblemáticas que próximamente tendrán lugar en municipios de la provincia y que invitan a descubrir la diversidad y vitalidad cultural que define a la provincia de Cáceres.
Los Escobazos en Jarandilla de la Vera (7 diciembre)
s la fiesta más fervorosa y concurrida de Jarandilla de la Vera. Se celebra anualmente la noche del 7 de diciembre y está declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. Su origen procede de los cabreros que bajaban de la Sierra de Gredos iluminándose con escobones de retama, que apagaban golpeándose amistosamente mientras cantaban coplas a la Virgen. La celebración comienza con la representación de la bajada de los pastores, cuando vecinos y visitantes acuden con sus escobones encendidos a la Plaza de la Constitución, iluminada por hogueras. El acto central es la procesión del Estandarte de la Inmaculada Concepción, llevado por un jinete que recorre el pueblo entre fuego y cantos tradicionales. La noche concluye con vino de pitarra y productos típicos alrededor de las hogueras, manteniendo viva una tradición que mezcla raíces paganas y devoción religiosa.
La Encamisá de Torrejoncillo (7 diciembre)
Declarada Fiesta de Interés Turístico de Extremadura, es la más representativa de Torrejoncillo y se celebra la noche del 7 de diciembre. Combina devoción religiosa con tradición bélica y folclore popular. Su origen más difundido se sitúa en la Batalla de Pavía. Según la leyenda, en 1525 cuando el capitán torrejoncillano Alfonso de Ávalos habría cubierto con sábanas blancas a sus soldados para camuflarlos en la nieve y sorprender al enemigo. Esta vestimenta se ha convertido en el símbolo de la festividad y el capitán atribuyó la victoria a la protección de la Virgen. El acto principal es la procesión del Estandarte de la Inmaculada Concepción, en la que cientos de jinetes (Paladines) cubren sus caballos y sus cuerpos con sábanas blancas decoradas (la vestimenta típica antes mencionada) y portan faroles. El ambiente es intenso, marcado por salvas continuas de escopeteros que lanzan vítores a la Virgen. Tras la procesión, el Mayordomo ofrece el tradicional convite con vino de pitarra y dulces.
Jarramplas en Piornal (19 y 20 de enero)
El pueblo más alto de la provincia de Cáceres celebra esta Fiesta de Interés Turístico Nacional en honor a San Sebastián. Su protagonista es un personaje enmascarado que viste un llamativo traje de cintas multicolores y un tamboril. El origen de esta figura es incierto, relacionado con leyendas de ladrones de ganado o antiguos ritos de purificación. Durante la celebración, Jarramplas recorre las calles mientras recibe un castigo simbólico: la multitud le lanza miles de nabos, superando los 20.000 kilos, en una continua lluvia de proyectiles. El personaje resiste con valentía, representando la expulsión de los males y el triunfo del bien mediante el sacrificio. Esta manifestación de devoción atrae cada año a numerosos visitantes.
Las Carantoñas de Acehúche (20 y 21 de enero)
Esta Fiesta de Interés Turístico Nacional es ancestral y también se celebra en honor a San Sebastián. El rito posee un fuerte simbolismo pagano y está centrado en los personajes conocidos como Carantoñas. Estos, cubiertos con pieles de animales y máscaras grotescas de corcho que imitan fieras del monte, recorren las calles emitiendo gruñidos, asustando a la gente, y participan en la procesión del santo. Simbolizan las fieras que, según la tradición, acompañaron y custodiaron el cuerpo de San Sebastián tras su martirio. Las Regaoras, vestidas de forma tradicional, van 'regando' con confeti el recorrido procesional. Se trata de una manifestación única que evoca la conexión entre la naturaleza salvaje y la fe.
Los Negritos de San Blas en Montehermoso (3 de febrero)
Los Negritos de San Blas es el nombre de una singular danza ritual del municipio de Montehermoso, declarada Fiesta de Interés Turístico de Extremadura. Se celebra anualmente el 3 de febrero, en honor a San Blas, patrón de la localidad. La danza es ejecutada por un grupo de hombres, los 'Negritos', que cubren sus rostros de negro (originalmente con hollín) y visten un traje negro bordado en vivos colores y siguen al palotero, quien dirige la danza y porta un alto sombrero cónico. La coreografía, de gran antigüedad y solemnidad, se ejecuta ante la imagen del santo, destacando los movimientos rítmicos y el repiqueteo de las castañuelas. Esta tradición, de origen incierto, podría evocar ritos de purificación o promesas cumplidas por curaciones atribuidas a San Blas.
La Ruta del Emperador Carlos V en la comarca de La Vera (Febrero)
La Ruta del Emperador Carlos V conmemora el último viaje del monarca desde el Castillo de los Condes de Oropesa (actual Parador Nacional) en Jarandilla de la Vera, hasta el Monasterio de Yuste, donde se retiró.
Esta ruta histórica, declarada Fiesta de Interés Turístico de Extremadura, tiene lugar anualmente a principios de febrero, coincidiendo con la fecha del viaje en 1557. El recorrido a pie, de unos 10 kilómetros, atraviesa los municipios de Jarandilla de la Vera, Aldeanueva de la Vera y Cuacos de Yuste.
La festividad incluye recreaciones históricas con participantes ataviados con ropas del siglo XVI, mercados renacentistas, degustaciones de productos locales y actos culturales a lo largo de las tres localidades. Es una inmersión en la historia y el espectacular paisaje de la comarca.