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FRANCISCO JOSÉ NEGRETE
Sábado, 29 de diciembre 2018, 11:00
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La Policía Local ha solicitado al Ayuntamiento hace más de tres años uniformes nuevos o bien que se «reponga a reposición», esto es, que se adquieran solo aquellas prendas que se han deteriorado tanto que no se pueden usar. Sin embargo, según los agentes, algunos llevan los uniformes rotos e incluso han comprado ellos mismos alguna prenda, dado que el alcalde y jefe del cuerpo, Ángel Vadillo, se niega a su petición.
Además, el primer edil ha remitido a los agentes una orden en la que les indica que a partir del 1 de enero vuelve a ser obligatorio que todos los agentes, estén o no de servicio, permanezcan todos los días del año en el ayuntamiento entre las 15.00 y las 15.30 horas.
El Ayuntamiento ha contratado a un alguacil, dada la falta de efectivos para estas fiestas, ya que los policías locales de municipio han sobrepasado el número de horas reglamentarias anuales de servicio. Los policías recuerdan que este asunto se llevó a la fiscalía y aclaran que los alguaciles «no pueden realizar ninguna función de la Policía, salvo las de vigilancia y dar aviso a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. No pueden dirigir el tráfico, ni denunciar, detener o cualquier otra función propia de la Policía», añaden.
En una comparecencia pública, el alcalde acusó a los agentes de haberse «vendido políticamente a Azagala e Ipal», y de estar haciendo él mismo los cuadrantes porque «no se cumplían mis órdenes ni querían hacer servicios nocturnos». Aseguró que los cita a todos, todos los días del año, de 15.00 a 15.30 horas para darles el cuadrante con los horarios.
Vadillo específico que un agente que acude al trabajo a esa hora con una camiseta en la que figura que está «castigado todos los días», se dio de baja por enfermedad el 28 de diciembre de 2017 hasta el 28 de junio de 2018. «Estuvo seis meses sin trabajar y el resto del año no ha trabajado ni tres meses», dijo de este agente, al que acusó de faltar a un servicio, a pesar de tener el cuadrante.
Vadillo aseguró que hay un «chantaje político de la Policía hacia el alcalde» y que «hay una serie de policías que quieren ser políticos».
Al haber varios agentes de baja, señaló que se «están provocando el estrés ellos mismos» y les invitó a pasar por un tribunal médico si van a estar tanto tiempo sin trabajar.
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