'El alcalde de Zalamea' homenajea a Miguel Nieto, su director durante 25 años

Sobre el montículo de arena de la plaza de la Constitución de Zalamea de la Serena se colocó una silla de enea y sobre ella, el reconocible sombrero que siempre portaba Nieto. Ante un rotundo minuto de silencio del respetable, se escuchaba la voz de la ayudante de dirección, Amelia David.

Un homenaje que continuaba con la primera escena de la obra en la que un grupo de niños y niñas interpretaban la tradicional canción de la palomita en este caso con la letra modificada para la ocasión: «Miguel, yo te quiero contar, lo que ocurrió en Zalamea en este mismo lugar. Pedro Crespo, Pedro Crespo, hacendado labrador y su hija pura y bella, la llamaban Isabel. Hasta siempre Miguel».

En primer lugar, la escenografía preparada para la ocasión que traía un nuevo emplazamiento que simulaba el exterior de una casa blanca encalada que permite dar mayor protagonismo al dístylo romano que corona la plaza, a la vez que la iluminación aporta esta edición un «punto extra de colorido» a la función y una luz más cenital. Uno de los momentos que más llamó la atención del público fue la ejecución a garrote del capitán Álvaro de Ataide, que apareció ahorcado ante la insistencia de Don Lope.

Entre otros cambios y aportaciones de la nueva directora, Olga Estecha, también se encuentra un texto algo más corto así como la incorporación de nuevos actores al elenco apuntando hacia un «relevo generacional» de esta representación popular.

La Diputación de Badajoz ha editado el libro 'Historia del alcalde de Zalamea: desde sus orígenes hasta ahora', del periodista Juan Pedro Sánchez, quien ha intentado plasmar «el enorme esfuerzo, sacrificio y compromiso de los vecinos de Zalamea con su teatro y con su propia historia».

La 26ª edición de 'El alcalde de Zalamea' arrancó con el 60% de las entradas vendidas.