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El alcalde de Alange señala el lugar en el que apareció el cadáver. :: hoy
El detenido por el crimen de Alange confesó haber matado a su expareja

El detenido por el crimen de Alange confesó haber matado a su expareja

El hijo de 18 meses que tenían en común crecerá junto a los padres de la fallecida después de que la Junta les haya concedido la custodia

E. F. V.

Sábado, 12 de marzo 2016, 00:37

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El joven de 27 años de edad detenido por la Guardia Civil como presunto responsable de la muerte de la chica de nacionalidad rumana que apareció flotando en el embalse de Alange el pasado 7 de enero confesó su crimen ante la Guardia Civil en una extensa declaración en la que asegura que cuando mató a su expareja se encontraba bajo los efectos del alcohol.

Esos extremos figuran en las declaraciones que realizó en dependencias policiales y que luego ratificó en el juzgado de Mérida que tuvo conocimiento del hecho en un primer momento. Con posterioridad, el caso pasó al juzgado sobre violencia de género que existe en la ciudad de Badajoz por ser en esa ciudad donde residía la chica en el momento de su muerte.

Horas después de su arresto, el presunto homicida explicó a los agentes que desde hacía tres años mantenía una relación con M. P. G., la joven de 21 años de nacionalidad rumana con la que tenía en común un niño de 18 meses.

Esa relación se había prolongado en el tiempo y ambos habían residido juntos en Aceuchal (Badajoz), pero el joven había sido denunciado por amenazar a la joven y un juzgado decretó el pasado mes de noviembre una orden de alejamiento que estaba en vigor cuando se produjo la muerte. La situación de desamparo que padecía la chica había aconsejado su ingreso en un centro de acogida para mujeres que sufren maltrato. Esa casa se encuentra en un lugar próximo a Badajoz y allí vivió la joven junto a su hijo hasta poco antes de morir.

El autor confeso del crimen explicó a los agentes que, a pesar de que su expareja residía en ese centro, habían seguido en contacto. También indicó que el día de Reyes la telefoneó para quedar con ella en Badajoz.

En su comparecencia ante la Guardia Civil relató que primero estuvieron hablando y bebiendo en una zona poco transitada de la capital de provincia y que, después de discutir, ambos subieron al coche del joven para dirigirse al embalse de Alange, lugar al que habrían llegado entre las 3.30 y las 4 de la madrugada. Una vez allí, y siempre según la declaración del detenido, habrían vuelto a discutir, momento en el que G. P. cogió la botella de Ballantines que tenían en el coche y golpeó a la chica en la cabeza, provocándole una herida.

Tras ese primer golpe, la joven habría bajado del coche para dirigirse hacia una pasarela de madera mientras era perseguida por su expareja, que le habría dado un segundo botellazo en la cabeza, rompiéndose en ese momento el recipiente de vidrio. Con posterioridad, la habría golpeado varias veces más con una piedra hasta que la víctima perdió el conocimiento y quedó con la cabeza sumergida en el agua.

Después de realizar ese estremecedor relato, el presunto homicida confesó a los agentes que regresó a Almendralejo para lavar el coche por fuera en una gasolinera y que luego se dirigió a Aceuchal para limpiar el interior del vehículo. En ese momento habría tirado en un contenedor de basura los zapatos de la chica, su chaqueta, sus llaves, una bufanda y el monedero. Luego habría regresado a su casa de Aceuchal y con posterioridad se habría dirigido a Fuente del Maestre para tirar en un contenedor de basura toda su ropa.

Finalmente regresó a casa «a esperar que fuese la policía a por él». En esa confesión aseveró que cuando cometió el crimen sentía celos y que estaba bajo los efectos del alcohol. También aseguro que se encontraba muy arrepentido.

Tras la muerte de M. P. G., la Junta de Extremadura se hizo cargo de la tutela de su hijo de 18 meses. Poco después solicitaron su custodia los abuelos maternos, que viven en Rumanía, y en fechas recientes los técnicos en menores han aceptado su solicitud, por lo que el niño crecerá junto a los padres de la fallecida.

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