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En 10 segundos se descapota y se puede hacer a 50 km/h. :: POLO
El Z4 de BMW, más grande, vuelve a la clásica capota de lona

El Z4 de BMW, más grande, vuelve a la clásica capota de lona

Motores de gasolina de 197, 258 y 340 CV con cambio automático de ocho marchas

J. A. POLO

ALDEA DEL OBISPO (SALAMANCA).

Lunes, 6 de mayo 2019, 08:39

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La saga Z de los descapotables, los roadster, en la marca bávara se remontan a 1988 con el Z1, en 1995 se lanzó el Z3, en el 2000 el Z8 y en 2003 el Z4, siendo ahora la tercera generación del biplaza.

Vuelve a la capota de lona, más clásica, pero más ruidosa y vulnerable a los vándalos que el techo metálico, empleando sólo 10 segundos en capotar o descapotar (antes eran 20) y pudiendose hacer rodando hasta 50 km/h (antes 40).

Fabricado en Alemania y en Austria, gana en longitud, 4,32 metros, es más ancho, 1,86, más alto, 1,30, la vías son más amplias (mayor estabilidad) y la batalla es más corta (mejor maniobrabilidad), no perdiendo habitabilidad, la justa para un biplaza, mientras que el maletero hace 281 litros, independientemente de si está capotado o no (antes eran 310 litros capotado y 180 descapotado), habiendo conseguido un reparto de peso equilibrado, 50:50, lo cual es siempre de agradecer en un propulsión trasera.

Tres son los propulsores, todos motores longitudinales, turboalimentados, de cuatro cilindros con dos litros de cubicaje, el 2.0i (48.900 euros) de 197 CV que hace los 100 km/h desde 0 en 6,6 segundos; el 3.0i (56.300 euros) con 258 CV, acelera en 5,4'' y ambos consumen 7,4 litros de gasolina y calzan neumáticos 225/50 delante y 255/45 detrás, en llantas de 17 pulgadas; en tanto que el M40i (70.750 euros) es un tres litros en sus seis cilindros, con 340 CV, acelera en 4,6'', consume 9,2 litros y las llantas de 18'' para neumáticos 255/40 delante y 275/40 detrás. Todos están unidos a un cambio automático de ocho velocidades, con levas tras el volante.

Su destreza deportiva sobre el asfalto pudimos comprobarla por una sinuosa ruta que nos adentró en Portugal bordeando el río Duero. Destaca el control de crucero, los faros de led, tapicería de cuero, los tres modos de conducción, el freno de estacionamiento eléctrico y las ayudas para el aparcamiento.

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