Borrar
Qué hacer si tenemos una avería por el mal estado de la carretera

Qué hacer si tenemos una avería por el mal estado de la carretera

Uno de cada trece kilómetros de la red de carreteras española presenta deterioros relevantes en más del 50% de la superficie del pavimento

J. Bacorelle

Madrid

Miércoles, 9 de diciembre 2020, 13:24

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El deterioro del pavimento es la causa principal del 94% de los accidentes ocasionados por culpa de la vía. Según la Asociación Española de la Carretera (AEC) uno de cada trece kilómetros de la red de carreteras española presenta deterioros relevantes en más del 50% de la superficie del pavimento, acumulando baches, roderas y grietas longitudinales y transversales.

El mal mantenimiento de las carreteras es un peligro para los conductores, puesto que eleva el riesgo de sufrir un accidente y puede generar importantes y costosos daños a los coches.

Si sufrimos un percance o una avería y pensamos que ha sido debido al mal estado del firme, lo primero que deberemos hacer es quedarnos en la zona y avisar a las autoridades, policía o Guardia Civil, y solicitar que realicen un atestado. Es importante hacer fotografías de la zona y de los daños provocados, así como recoger datos de los posibles testigos (nombre, apellidos y numero de teléfono).

Deberemos notificar el incidente a la compañía aseguradora del vehículo, tanto si lo tenemos a todo riesgo como a terceros. Si queremos hacer una reclamación por nuestra cuenta, deberemos presentar un escrito ante la administración responsable de la vía. En el caso de carreteras nacionales y autovías, la reclamación la deberemos presnetar en el «registro» del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana a través de la web www.mitma.gob.es. Si se trata de una carretera comarcal de responsabilidad autonómica, tenderemos que dirigirnos a la comunidad autónoma correspondiente. Y si la vía es urbana, el sitio donde tendremos que presentar la reclamación es la ventanilla del Ayuntamiento correspondiente.

Finalmente si la avería o el accidente se produce por culpa del mal estado de una autopista de peaje, la reclamación se tendrá que realizar ante la empresa concesionaria. La puedes localizar a través de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras SEOPAN.

Las principales averías

Uno de los elementos que más sufre al conducir habitualmente por carreteras mal asfaltadas es el sistema de suspensión. Su misión es la de absorber las irregularidades del pavimento, intermediando entre las ruedas y la carrocería, asegurándose de que los neumáticos estén siempre en contacto con el asfalto y permitiendo una conducción más estable y segura. Sin embargo, los botes provocados por los baches y huecos presentes en la calzada pueden dañar este sistema afectando a componentes clave como los amortiguadores o los silentblocks del trapecio. En caso de avería de alguno de estos elementos, la reparación ascendería a unos cientos de euros. Así por ejemplo, el coste medio de cambiar los amortiguadores según los datos de Autingo alcanza los 400 euros, mientras que reemplazar los silentblocks del trapecio de todos los ejes supone unos 150 a 190 euros, dependiendo del modelo del coche.

La dirección también puede convertirse en víctima del asfalto deficiente. Una de las consecuencias sería la holgura de la rótula de dirección, lo que exigirá un cambio urgente cuyo coste ronda los 179 euros. A su vez también se puede ver afectada la alineación de las ruedas, provocando una pérdida del paralelismo, lo que ocasionará un mayor desgaste de los neumáticos, más consumo de combustible y mayor peligro al volante.

Además de todo lo anterior, cabe señalar que los neumáticos también sufren en exceso por su contacto directo con el pavimento, acelerando el desgaste o aumentando las posibilidades de reventones y pinchazos. Asimismo, las vibraciones y golpes provocados por el bacheado también pueden afectar al circuito eléctrico del vehículo, los sistemas de elevalunas y cierre centralizado, salpicadero o incluso deteriorar el interior del habitáculo, entre otras cosas.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios