La operación contra la droga en Mérida se salda con 16 detenidos y tres puntos de venta desmantelados

Numerosos agentes de la Comisaría de Policía Nacional de Mérida participaron la tarde del martes en el operativo antidroga, que contó con el apoyo de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) que se desplazó desde Badajoz.

Esta primera fase de la intervención culminó con la detención de catorce personas. Trece por su vinculación al tráfico de drogas, mientras que una más fue arrestada por atentado a la autoridad. Según ha podido saber HOY, se trata de una persona del barrio que increpó a los agentes cuando estaban llevando a cabo la operación.

Varios de los detenidos fueron puestos en libertad en la misma tarde de la operación, mientras que otros tuvieron que pasar la noche en los calabozos. Ayer se esperaba una decisión sobre si debían pasar a disposición judicial.

En la mañana de ayer miércoles otras dos personas, a las que también estaba buscando la Policía Nacional, se presentaron de manera voluntaria en la Comisaría de Mérida, por lo que en total han sido 16 personas detenidas por la operación antidroga.

La actuación contra el tráfico de estupefacientes tuvo lugar en la barriada de Juan Canet de Mérida, situada al norte de la ciudad, cerca de San Lázaro y San Agustín. Una operación en la que los agentes policiales estuvieron trabajando toda la tarde confiscando útiles y haciendo registros domiciliarios.

Concretamente, se llevaron a cabo cuatro registros domiciliarios, en los que se han desarticulado tres puntos de venta de droga. En el cuarto se ha desarticulado una plantación de marihuana.

Según indica La Policía Nacional, se han intervenido numerosos objetos para la distribución y posterior venta de estas sustancias ne el mercado ilícito. Asimismo, entre los útiles incautados se encuentran cuatro vehículos, dinero en efectivo, cocaína, marihuana y hachís.

La Policía Nacional señala que los detenidos no forman parte de un clan familiar, pero los agentes dela investigación estiman que estaban coordinados entre ellos.

La última redada de estas características se produjo en abril del año pasado en la barriada de San Lázaro cuando la Policía Nacional detuvo a ocho personas e incautó 712 dosis de 'revuelto' (mezcla de cocaína y heroína), 54 dosis de cocaína base, gran cantidad de sustancias anabolizantes ilegales, dos vehículos de alta gama, tres tablets y 600 euros en metálico. Casi todo el dinero intervenido estaba en billetes de cinco y diez euros.

Este grupo, según fuentes policiales, estaba perfectamente organizado para operar. Se habían repartido las funciones y cada uno tenía un cometido. Unos se dedicaban a labores de vigilancia, otros tenían la orden de avisar y alertar de la presencia policial, otros trasladaban la mercancía, otros captaban clientes y el resto se dedicaba a la venta directa de droga al por menor.

Esa vez el registro se llevó a cabo en tres domicilios de forma simultánea, durante los cuales los agentes se encontraron con fuertes medidas de seguridad en las viviendas, algo habitual en inmuebles donde se vende droga.