El hotel del centro de transportes de Mérida ahonda su estado de abandono

Desde que el centro fue inaugurado hace 20 años, en el 2003, el hotel no ha llegado a abrir sus puertas como tal, aunque sí prestó servicio como centro de alojamiento.

Desde la Consejería de Infraestructuras indican a este periódico que un año antes, en el 2002, el edificio se puso a disposición de la concesionaria de la gestión.

Cuando finalizó el contrato a principios de 2014, en la etapa del Gobierno del PP de José Antonio Monago, «el centro de alojamiento se encontraba en un estado lamentable de mantenimiento». Por este motivo, en 2015, la consejería de entonces anunció en el Diario Oficial de Extremadura su adaptación y mejora para convertirlo en un hotel por 149.822 euros.

Pero no es hasta 2018 cuando se tramita finalmente la contratación de las actuaciones necesarias para la adecuación de las instalaciones y la nueva puesta del servicio del hotel.

El importe entonces ascendía a unos 471.900 euros. Sin embargo, por la falta de dotación presupuestaria en 2019 se suspende la licitación, y el proyecto acaba perdido de nuevo en un cajón de la Administración de la comunidad autónoma.

Desde la Consejería que encabeza Manuel Martín Castizo insisten en que debido al deterioro y el abandono del hotel, «provocados por la dejadez del anterior Gobierno regional», el edificio ha sido objeto de saqueos y daños materiales.

También que por este motivo, los recursos necesarios para poder rehabilitar y poner en marcha el hotel en la actualidad se han incrementado de forma notable.

De los cerca de 150.000 euros de los primeros trabajos anunciados en 2015, a los 400.000 euros de la licitación del 2018, la actuación que ahora necesita el hotel se ha visto incrementada casi hasta alcanzar los 1,5 millones de euros, cuatro veces más que su última licitación.

«Cantidad que no está presupuestada para el ejercicio del 2023 por parte del Ejecutivo saliente», especifican desde la consejería de Infraestructuras, Transporte y Vivienda.

Los 1,5 millones de euros se sumarían a los 14,4 que invirtió la institución autonómica en 2003 para la creación del centro de transportes que ocupa una superficie total de 120.000 metros cuadrados.

La construcción del Centro Regional de Transportes comenzó en Mérida en 1998. En su primera fase los trabajos se centraron en la construcción del hotel, un edificio administrativo, una gasolinera y naves de fragmentación de carga para vehículos pequeños.

Con la segunda fase se incorporaron al centro las instalaciones de la Inspección Técnica de Vehículos y otras 14 naves de fragmentación de carga destinadas a vehículos de gran tamaño.

En cuanto a las posibilidades del hotel, el edificio cuenta con dos plantas. La superior de 983 metros cuadrados, y la baja con 1.283 metros.

En esta última se situarían, según el último proyecto, un despacho administrativo, la recepción y el vestíbulo del hostal, además de la cafetería, restaurante, cocina, comedor y zona de descanso para los trabajadores, almacenes de lavandería, aseos y vestuarios.

En la superior, irían ubicadas las habitaciones y una zona de estar para los clientes de este epacio de alojamiento.

Toda esa infraestructura se encuentra abandona por completo y en avanzado estado de degradación, con una inversión millonaria por parte de la Junta de Extremadura que no ha servido, hasta ahora, para nada.

Trabajadores de la ITV y usuarios de la zona llevan tiempo alertando de esa realidad sin, hasta ahora, tener éxito en su denuncia.