La artesanía que aúna diseño e historia

De 80 trabajos presentados por artesanos de todos los rincones del país, el trabajo de Terracota volvía a quedar entre los tres primeros. El anuncio se produjo hace unos ocho meses, el resultado no se ha conocido hasta principios de esta semana tras el desarrollo de una gala, «al puro estilo Goya», como describe uno de los protagonistas. El sello artesano y emeritense quedó de nuevo en segunda posición, detrás del trabajo de una ceramista japonesa que reside en Sevilla. «Nosotros estamos contentísimos, durante ocho meses hemos disfrutado como finalistas», indica Pérez. Al evento acudieron, además de amigos y familiares de los autores de la colección, representantes políticos de la región.

Y si la suerte no se ha posicionado a su lado para conseguir el primer premio, sí que lo ha hecho para sacar partido a la colección. «De cada modelo hay 50 ediciones, y en algunos ya vamos por la 43, por lo que estamos más que satisfechos del éxito y la acogida que está teniendo por sí sola», recalca.

Tanto es así, que la Venus de Terracota ha llegado a los lugares más insospechados del mundo como Miami o el Museo Guggenheim de Bilbao. «Les pedimos a nuestros clientes que se hicieran fotos con las piezas que adquirían y las subieran a las redes sociales. Le llamamos 'Venus Selfie'», explica el artesano. Gracias a esta iniciativa el trabajo del emeritense ha estado moviéndose por las redes durante meses.

El artesano emeritense de raíces salvaterreñas, junto con el diseñador gráfico, se inspiró en la capital autonómica como guiño a su historia para crear la colección. Eso sí, sin dejar a un lado el espíritu más vanguardista. «A la gente le ha llamado mucho la atención la número 16. Tiene la palabra elocuencia, la más bonita de nuestro vocabulario, pintada en la cara de Venus», describe. Se trata de una pieza especial que se trabaja directamente con los clientes. «Ellos eligen qué poner en el rostro», resalta. La simbiosis entre lo antiguo y el rediseño, marca de la casa, puede que sea el secreto de su éxito. «Siempre buscamos darle una vuelta de tuerca a todo. Por ejemplo, hemos reinventado una vajilla romana del siglo I que se podrá adquirir en el Reina Sofía con esa mezcla», destaca.

Pérez reconoce no haber pensado en su siguiente participación en el Concurso Nacional de Artesanía, pero sí que espera que la tercera sea por fin la vencida para alcanzar el primer premio.