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Tomba Porta Sarno. r.c. / Vídeo: ATlAs
El último misterio de Pompeya: la tumba de Marco Venerio Secundio

El último misterio de Pompeya: la tumba de Marco Venerio Secundio

Un equipo de investigadores de la Universidad de Valencia descubre el peculiar enterramiento de un liberto en la antigua ciudad romana destruida por el Vesubio

dario menor

Roma

Martes, 17 de agosto 2021, 14:55

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Antes de que quedara sepultada por la erupción del volcán Vesubio en el año 79 d. C., Pompeya era una ciudad multiétnica y abierta, en la que el latino convivía con el griego, la lengua franca del Imperio Romano, y existía libertad para enterrarse según los propios gustos y costumbres. También era posible hacer carrera y pasar de esclavo a liberto hasta convertirse en un personaje importante de aquella floreciente urbe ubicada en la orilla del golfo de Nápoles y que hoy sigue sorprendiendo a los arqueólogos.

El protagonista del último hallazgo de Pompeya es Marco Venerio Secundio, cuya tumba, de características únicas y que conserva su cadáver en parte momificado, fue descubierta hace dos semanas por un equipo de investigadores coordinados por Llorenç Alapont, miembro del departamento de Prehistoria, Arqueología e Historia Antigua de la Universidad de Valencia, y Luana Toniolo, arqueóloga del Parque Arqueológico de Pompeya. El enterramiento se encuentra en la necrópolis de Porta Sarno, al este del centro urbano de la antigua ciudad, y aunque fue hallada en los 90 los arqueólogos solo empezaron a trabajar en ella hace tres años.

«Es un descubrimiento muy importante por varios motivos», cuenta a este diario Alapont, que reconoce que «ni en sus mejores sueños hubiera imaginado encontrar algo así». La primera sorpresa vino con la inscripción de la tumba, en la que se explica que Marco Venerio Secundio había sido un esclavo público que trabajaba en la administración de la ciudad y servía en el templo de Venus. Tras su liberación, pasó a formar parte del Colegio de los Augustales, encargados del culto al emperador, y debió alcanzar un alto nivel económico y social. Solo así se explica que pudiera permitirse la construcción de esta magnífica tumba y el pago de cuatro días de espectáculos en griego y latín, como puede leerse en la lápida.

«Es la primera constatación de que en Pompeya se celebraban obras de teatro y de canto en griego», explica Alapont. El gran valor de este enterramiento viene también por el hecho de que Marco Venerio Secundio, cuyos huesos muestran que falleció cuando tenía unos 60 años y sin haber realizado nunca trabajos pesados, eligió ser inhumado en un momento en el que este rito solo se utilizaba para los niños pequeños, mientras que el resto de la población elegía la cremación. «En este caso, en cambio, decidió diseñarse una tumba con una cámara funeraria que albergara su cuerpo». Éste, además, fue embalsamado, lo que ha permitido que llegue en parte momificado hasta nuestros días y puedan verse así restos del cabello y del cartílago de una oreja, que serán ahora estudiados junto a otros tejidos por la Unidad de Análisis Químico de la Universidad de Valencia.

El gran misterio que rodea el hallazgo de la tumba de Marco Venerio Secundio es por qué decidió que lo enterraran en lugar de ser incinerado, más aún teniendo en cuenta que en el complejo funerario han sido halladas dos urnas con los restos de sus familiares que, en cambio, fueron cremados. «Eligió un enterramiento al estilo griego. Tal vez porque provenía de Grecia o tenía gustos helénicos», cuenta Alapont. «Otra hipótesis es que eligió ir en contra de los cánones establecidos en su época. Esto es revolucionario, porque demuestra una libertad a la hora de elegir cómo era tu funeral y transición hacia la otra vida, desmontando así la idea que teníamos de que se trataba de ritos muy rígidos, sobre todo entre las clases altas».

La tumba de Marco Venerio Secundio, que aún no puede ser visitada por el público, supone «oro para los investigadores», según el científico español, debido a la gran cantidad de información que permite obtener sobre arqueología funeraria, arquitectura, paleografía, pintura mural y estudio de los restos humanos.

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