Borrar
¿Qué ha pasado hoy, 28 de marzo, en Extremadura?

Plan de recuperación

Para conseguir la financiación millonaria de la UE, los países deben presentar proyectos que faciliten un crecimiento sano

diego lópez garrido

Viernes, 3 de julio 2020, 00:21

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Debemos reconocer que el plan de recuperación (Recovery Plan) que ha propuesto Úrsula Von der Leyen es determinante para que España (y Europa) superen la gigantesca crisis económica que ha desencadenado la propagación de la covid-19. Pero esta lluvia de millones no será a cambio de nada. Habrá una condicionalidad, aunque de distinta naturaleza que la que hace diez años ahogó las economías de los países deudores y el conjunto de la Eurozona. Ahora, la condicionalidad será muy diferente, porque se establecerá no sobre la cantidad, sino sobre la calidad. Esencialmente en dos tendencias transversales: transición energética (Green New Deal) y digitalización. Pero no solo eso. Los países tendrán que presentar proyectos de inversión en reformas de estructuras que faciliten una recuperación o crecimiento sano. Además, no bastará el endeudamiento, que lo habrá. Será necesaria la financiación de la deuda.

A mi juicio, hay diez materias clave que España ha de presentar como proyectos para que la Unión Europea los financie con cargo a ese 'Recovery Plan'. Proyectos con una dimensión nacional, pero también europea:

1. Impulsar la descarbonización de la industria y adaptar sus necesidades energéticas a las nuevas estrategias, procurando que la transición energética no implique un aumento de costes para la industria.

2. Invertir en el sector educativo y de formación profesional para desarrollar perfiles que permitan ampliar las oportunidades de empleo para los jóvenes, enfocadas en 'cibercapacidades' que fomenten la innovación.

3. Incrementar el gasto destinado a I+D+i hasta un nivel superior al 2,5 % del PIB. Es imprescindible potenciar el sistema de ciencia y tecnología porque, una vez más, se trata de una prioridad de inversión, no de gasto corriente.

4. Cerrar la brecha digital como parte importante de la estrategia de recuperación. Todavía persisten brechas digitales en España, tanto a nivel territorial como entre empresas, con grandes diferencias entre las de menor dimensión y las grandes. Por otra parte, persisten las brechas socioeconómicas, sobre todo las relacionadas con la edad, la formación y la renta. Algunas situaciones vividas durante el confinamiento las han hecho aún más palpables, generando, por ejemplo, desigualdades en Educación o en servicios de salud a distancia.

5. Reforma interna de la gestión de la empresa. La empresa, y los inversores en ella han de integrar en su cultura la transparencia y la ética, los derechos humanos, el cuidado del medio ambiente, la igualdad de género, entre otros valores. Ha de cumplir, en definitiva, una función social, sin perseguir exclusivamente el lícito beneficio.

6. Cambiar el sistema de residencias de mayores; tanto la parte social o residencial, como la sanitaria. El Sistema Nacional de Salud debe hacerse cargo de la atención sanitaria de los ciudadanos españoles que vivan en residencias públicas y privadas

7. La gobernanza de los medicamentos, productos sanitarios, tecnología y logística de insumos: garantizar la seguridad, autonomía y sostenibilidad. Una de las lecciones más duraderas de la crisis de la covid-19 es que la salud pública y los servicios del Sistema Nacional de Salud son un componente esencial de la seguridad nacional, asignándole prioridad política y los instrumentos y medios necesarios. Ello implica, entre otras cosas: desarrollar capacidad nacional suficiente para la producción de material sanitario de protección personal, de vacunas, medicamentos críticos, etc.; poner en marcha la logística con reservas estratégicas de material sanitario; disponer de holgura y reserva de camas de agudos, UCIs y otros recursos, ampliando la capacidad actual; planificar las necesidades de personal sanitario tanto en cantidad como en capacitación flexible para hacer frente a emergencias sanitarias; disponer de planes de contingencia para situaciones de emergencia.

8. Pacto de Estado por la Vivienda, entendido en clave de keynesianismo inteligente: al invertir en la construcción masiva de viviendas asequibles, en especial para los jóvenes, se crean numerosos puestos de trabajo, se avanza en la transición verde y se atiende a la demanda insatisfecha, garantizando por el camino el derecho a la vivienda.

9. Transición ecológica justa: España deberá presentar proyectos concretos, medibles y precisos, que sean creíbles y que contribuyan con solvencia a conseguir los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) y la descarbonización completa en 2050.

10. Una nueva agenda social debe emerger. Hay que dar un salto cualitativo a ese debate en la Unión y plantearse logros tales como un subsidio de desempleo o un ingreso mínimo vital a nivel europeo, y otras prestaciones.

Naturalmente, todos estos proyectos han de estar sustentados ante la Comisión Europea en una clara unidad de las fuerzas políticas españolas. Gobierno, partidos, sindicatos, organizaciones de la sociedad civil y 'think tanks' deberíamos estar trabajando ya en esa dirección. Los fondos del 'Recovery Plan' deberían empezar a llegar a España antes del 1 de enero de 2021.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios