Borrar

El candomblé, la religión que «resiste» a la creciente intolerancia en Brasil

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

Martes, 21 de mayo 2019, 17:20

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

/MARCELO SAYÃO
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

/MARCELO SAYÃO
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

/MARCELO SAYÃO
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

/MARCELO SAYÃO
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

/MARCELO SAYÃO
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

/MARCELO SAYÃO
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

/MARCELO SAYÃO
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

/MARCELO SAYÃO
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.
El «terreiro» de Candomblé en el municipio de la Baixada Fluminense, una de las regiones más deprimidas de la zona metropolitana de Río, ha sido atacado en ocho oportunidades. El aumento de los ataques a templos y seguidores de religiones de origen africano ha prendido de nuevo las alarmas en Brasil, un país que ha visto crecer la intolerancia religiosa, pero también la «resistencia» de algunos de sus cultos, como el candomblé.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios