Las joyas de Tous brillan por sus dudas

Tous, que ha hecho del oso el símbolo de la marca, ha rechazado las acusaciones. Asegura que todas sus joyas de oro y plata «son siempre de primera ley» y que cumple con todos los estándares mundiales de certificación de metales preciosos.

La Audiencia abrió las pesquisas a raíz de una denuncia que interpuso el pasado mes de diciembre la Fiscalía, que sospecha que Tous ha podido cometer los delitos de estafa continuada, falsedad documental, publicidad engañosa y corrupción entre particulares.

El origen de la investigación se remonta a finales de 2018, cuando la Asociación de Consumidores y Usuarios de Joyería (Consujoya) presentó ante la Guardia Civil de Córdoba una denuncia asegurando que había detectado que joyas de Tous adquiridas en establecimientos de Córdoba, Málaga y Madrid, así como en su web, estaban rellenas de un material no metálico, a pesar de que la empresa las vendía como oro de 18 o 24 quilates o plata de primera ley.

Las muestras fueron reenviadas al laboratorio Ecomep de Córdoba, cuyo informe constató que el relleno era no metálico y contenía una estructura hidrocarbonada (un portavoz de Consujoya habló de material «plástico») que incumplía la normativa del Reglamento de la Ley de Metales. Ese mismo veredicto alcanzó el Instituto Universitario de Nanoquímica de la Universidad de Córdoba al analizar las piezas adquiridas en la web. Dado el daño que este proceso judicial puede generar a la compañía, la intención es que la investigación avance con rapidez.

Tous, que tiene su sede en Manresa, mantiene que todas las joyas que comercializa en España están certificadas por laboratorios oficiales autorizados y cumplen con la Ley de Metales. Precisa que trabaja sus piezas utilizando la tecnología de microfusión y de «electroforming», una técnica que, dependiendo del tamaño, forma y metal precioso empleado, puede incorporar «núcleos no metálicos que ayuden a conferir estabilidad a la joya».