El tiempo de espera en cinco de las ITV públicas alcanza ya el mes

Ni es verano ni el estío está cerca. Y, sin embargo, hay colas en las ITV (Inspección Técnica de Vehículos) públicas de la región. De hecho, en cinco de ellas se alcanza o se supera ya el mes de espera de media para vehículos ligeros, según los datos facilitados por la Junta referentes al retraso medio acumulado en lo que va de año.

Según los usuarios, ese tiempo medio que da la Administración se queda corto. «Yo he pedido una cita en la ITV de Plasencia en este mes de marzo y me la han dado para junio», dejan claro los papeles facilitados por Manuel Andrés. Por lo que el tiempo que tendrá que esperar para la revisión de su vehículo es más del doble de los 26 días de media que fija la Junta para la ITV de la capital del Jerte.

Y según los datos de la Dirección General de Transporte, perteneciente a la Consejería de Medio Ambiente, Políticas Agrarias y Territorio, la ITV de Plasencia no es la que más lista de espera tiene en lo que va de año. Sus 26 días de media son similares a los de Moraleja o cercanos a los 24 de Badajoz, pero bastantes menos que los 35 que esperan los usuarios para ser atendidos en la ITV de Coria o los 36 de la de Cáceres. Estas cinco ITV de la decena de públicas que hay repartidas por la región son las que mayor lista de espera soportan.

Las otras cinco públicas –ubicadas en Mérida, Zafra, Villanueva, Trujillo y Navalmoral– tienen un tiempo de espera medio inferior a los 15 días. La plantilla adscrita a estas estaciones gestionadas directamente por la Administración autonómica está formada por 9 ingenieros, 91 mecánicos y 65 administrativos.

Según la Dirección General de Transporte, «puntualmente hay ciertas estaciones de ITVque tienen dificultad para atender la demanda de inspecciones solicitadas, todo ello debido a la cantidad de solicitudes recibidas que desbordan la capacidad inspectora que tienen los centros en función del personal disponible en cada momento». Por ello, Transporte dice que actualmente se están estudiando distintos procedimientos para solucionar este problema, «que produce trastornos en los administrados», y añade que «en los próximos meses se pondrán en marcha medidas encaminadas a incrementar el número de inspecciones en aquellos centros donde el retraso es mayor».

Los trabajadores consultados aseguran que las medidas tienen que venir por un aumento de la plantilla, en algunas estaciones insuficiente para atender la demanda, y una mejora de las instalaciones que en algunos casos, como en la ITV de Badajoz, están obsoletas y no permiten además ampliaciones.

«Las bajas en las plantillas hay que cubrirlas desde el primer día que se producen para dar el servicio necesario al ciudadano», señala María Ángeles Rodríguez, de UGT.

«Es preciso que se dote del personal que requieren las estaciones para no prolongar el tiempo de espera; esta debía haber sido siempre la solución para mejorar el servicio y no las privatizaciones que se decidieron», añade Juan José Samino por parte de CSIF.

«CC OO siempre se ha opuesto, para evitar estas situaciones, a que un servicio se ofrezca desde el ámbito privado cuando ya se da desde lo público», en palabras de Guillermo Barroso.

Desde el punto de vista de los sindicatos, la falta de inversión y mejoras en las ITV públicas y la no cobertura de las bajas generan un aumento de la lista de espera, «que hacer pensar que el objetivo es justificar la privatización», según Antonio Mateos de SGTEx.

De hecho, las ITV privadas no tienen lista de espera y en ellas, a diferencia de las públicas, se pueden abonar las tasas. La red de ITV privadas está conformada hoy por otras diez estaciones fijas en Extremadura, gestionadas en régimen de concesión administrativa por la empresa Itevebasa, ubicadas en Almendralejo, Olivenza, Don Benito, Castuera, Azuaga, Herrera del Duque, Jerez de los Caballeros, Valencia de Alcántara, Logrosán y Jaraíz de la Vera; más dos unidades móviles de vehículos ligeros y ocho de vehículos agrícolas. Su plantilla está formada por 12 ingenieros, 104 mecánicos y 21 administrativos.