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Sábado, 22 de septiembre 2018, 08:59
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El teletrabajo comenzará a funcionar en la región el próximo 1 de octubre y serán finalmente 87 los empleados públicos que empezarán en esta nueva modalidad laboral. Son los trabajadores a los que la Junta ha concedido la autorización precisa, los que ayer viernes terminaron el curso de formación 'online' que han venido desarrollando desde el pasado 11 de septiembre para poder iniciar el teletrabajo en el plazo de una semana.
Estos 87 empleados -48 mujeres y 39 hombres- son bastantes menos de los 217 que habían solicitado una de las 382 plazas que han centrado la primera convocatoria de teletrabajo en la Administración extremeña, de las que 65 estaban destinadas al personal de la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales, 100 puestos de trabajo para los trabajadores de la Consejería de Hacienda y Administración Pública, 93 para Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, otras 68 para Educación y Empleo, 36 más para empleados públicos de Economía e Infraestructuras, 15 para Cultura e Igualdad y cinco para Presidencia.
En ninguno de los departamentos de la Junta se han ocupado todas las plazas, si bien ha sido Hacienda y Administración Pública la que más plazas ha concedido. De los 87 empleados a los que se les ha autorizado iniciar el próximo 1 de octubre en la modalidad del teletrabajo, 40 pertenecen a esta consejería, la única en la que son más hombres que mujeres: 25 frente a 15.
La segunda consejería con más empleados en teletrabajo (seis hombres y siete mujeres) es la de Cultura e Igualdad, seguida por la de Medio Ambiente, Políticas Agrarias y Territorio (un hombre y nueve mujeres), Sanidad y Políticas Sociales (tres hombres y seis mujeres) y Educación y Empleo (dos hombres y cuatro mujeres), que cuenta con seis empleados públicos en teletrabajo igual que la Consejería de Economía e Infraestructuras (un hombre y cinco mujeres). La relación la cierra Presidencia, en la que de las cinco plazas ofertadas solo se ocuparán tres (un hombre y dos mujeres).
Cada uno de los 87 autorizados podrá trabajar desde el 1 de octubre tres días a la semana desde su domicilio y los dos restantes en su centro de trabajo. Porque el objetivo prioritario de esta primera convocatoria de teletrabajo es habilitar nuevas vías en la región para mejorar la conciliación de las vidas laboral y familiar. Motivo por el que, tal como recoge el decreto de teletrabajo de Extremadura, los puestos de trabajo que han centrado la convocatoria, y los que centrarán las futuras, son los que no requieren servicios presenciales.
Esta es, además, la causa que explica por qué un gran número de solicitudes han sido denegadas por parte de la Junta. Según señala la Consejería de Hacienda y Administración Pública, «el decreto del teletrabajo recoge una serie de puestos de trabajo que son susceptibles de acogerse a esta modalidad; y, por el contrario, otros que, por sus funciones, deben realizarse exclusivamente de forma presencial». De ahí que las solicitudes hayan sido rechazadas en el caso de los empleados que hayan pedido el teletrabajo cuando ocupan puestos presenciales.
Los que comiencen el próximo 1, los 87 autorizados, deberán aportar el equipamiento básico para realizar sus tareas desde casa. Este «estará constituido por un ordenador personal con acceso a internet a través de una conexión suficiente y segura, para que pueda desempeñar en su propio domicilio las tareas propias de su puesto de trabajo», tal como detalla el decreto de teletrabajo.
Del mismo modo, con la normativa en vigor, corresponderá a los empleados «solucionar las incidencias que le resulten imputables en el hardware o software de su equipo informático». Y, en caso de que se produzca un mal funcionamiento del equipo que le impida trabajar desde casa, «deberá incorporarse a su puesto en su centro de trabajo al día siguiente».
Cabe recordar que aunque esta primera convocatoria está cerrada, tanto las mujeres embarazadas como víctimas de violencia de género pueden acogerse al teletrabajo en cualquier momento.
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