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¿Qué ha pasado hoy, 28 de marzo, en Extremadura?

Sobre la Medalla a los docentes

CARTAS A LA DIRECTORA ·

ROSALÍA SAAVEDRA RODRÍGUEZ | BADAJOZ

Domingo, 2 de agosto 2020, 11:42

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El martes 29 de julio recibimos la deseada noticia, los docentes extremeños somos dignos merecedores de la maravillosa Medalla que la Junta otorga cada 7 de septiembre a sus extremeños más laureados. Gracias en nombre de toda la comunidad educativa por tan merecido reconocimiento, las familias, alumnado, personal de administración y servicio, personal de limpieza, miembros del transporte escolar, equipos educativos y docentes (comunidad educativa todos) estamos inmensamente agradecidos.

Cuando leímos este reconocimiento y la mañana siguiente al despertar, nos vinieron varios recuerdos a la memoria. Hemos recordado la mañana de aquel 13 de marzo, cuando a las dos menos cinco de la tarde recibimos en nuestros centros educativos, unas instrucciones de cara a los siguientes 15 días. Nos marchamos a casa con la cabeza llena de dudas y el alma empobrecida, una vez más la Junta de Extremadura, su Consejería de Educación, volvía a tratar a la comunidad educativa como el último eslabón de esta cadena social.

Somos merecedores de esta medalla compañeros, sentíos orgullosos de ella, nos la hemos ganado con nuestro esfuerzo diario desde ese maldito 13 de marzo, cuando tuvimos que explicar a nuestros alumnos que tardaríamos días en vernos, hasta el 30 de junio, cuando dimos por finalizado este raro, peculiar y fatídico curso escolar.

Pusimos nuestros medios tecnológicos, económicos, y humanos; hemos proporcionado nuestros correos personales y números de teléfono; hemos hablado con mamás por whatsapp, con cientos de papás por correo electrónico, Zoom, Telegram... Hemos aprendido en tiempo récord a adaptar programaciones y buscar recursos digitales; hemos hecho pedagogía dentro del caos de esta pandemia. Somos dignos merecedores de esta medalla.

Porque entendemos, señor Vara, que esta medalla va asociada a todo aquello que venimos pidiendo encarecidamente para comenzar el nuevo curso de muy diferente modo a cómo hemos terminado el anterior.

Nos imaginamos a la Medalla puesta en la puerta de todos y cada uno de los centros educativos, inmejorable barrera de freno contra la covid. Con esa Medalla nos sentimos seguros, ya no hará falta todo aquello que deseamos para nuestros alumnos, como los necesarios desdobles de grupos, el innegable aumento de la plantilla docente, las mascarillas para todos los alumnos y profesores, la limpieza de zonas comunes durante la jornada lectiva, la seguridad del mantenimiento de la distancia social... todas ellas, medidas exigidas por las autoridades sanitarias.

Los centros educativos son espacios de conocimiento, transmisión de valores, aprendizaje, un lugar de convivencia. Señores de la Junta de Extremadura, gracias por la medalla, pero eviten convertir nuestros colegios e institutos en centros de contagios. La comunidad educativa extremeña no lo merece.

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