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¿Qué ha pasado hoy, 28 de marzo, en Extremadura?
Mourao: Está junto al primer pueblo que se encuentra en Portugal saliendo por Villanueva del Fresno. Se ampliará al doble de tamaño. Fue inaugurada el 17 de julio. PAKOPÍ

Portugal toma la delantera en Alqueva

En la orilla española del mayor lago de Europa, la referencia es Cheles, más grande pero que este año ha perdido público

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Domingo, 27 de agosto 2017, 08:21

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Para los extremeños que no tienen a mano una playa de agua salada siempre es una buena noticia que las de agua dulce den un salto de calidad. Esto ha ocurrido este verano, aunque sea al otro lado de la frontera con Portugal. De nuevo, el país vecino ha demostrado que sabe aprovechar mejor el lago de Alqueva, el más grande de Europa y que cada vez cobra más vida, aunque sea en la orilla lusa.

A menos de una hora de Badajoz, dos nuevas playas fluviales, la de Monsaraz y la de Mourao, se han estrenado este verano. La primera el 1 de junio, la segunda el pasado 17 de julio. Extremeños, sobre todo de la provincia pacense, han empezado a visitarlas y han quedado asombrados del partido que se le puede sacar a un pantano.

La más completa es la de Monsaraz, que ya tiene el distintivo de bandera azul y está situada a los pies de esta pequeña villa fortificada y con encanto que recibe visitantes todo el año. Estos turistas tienen desde este verano la oportunidad de darse un baño, comer o disfrutar de actividades náuticas por las todavía despobladas aguas de Alqueva.

Monsaraz y Mourao han inaugurado este verano dos playas fluviales con instalaciones punteras

Inaugurada por la secretaria de Estado de Turismo de Portugal, Ana Mendes Godinho, tiene un amplio espacio para aparcar, arena, césped, sombrillas, merenderos de madera, parque de juego para los niños, pista de voley playa, baños, duchas, contenedores para todo tipo de basura y una plataforma de madera que prácticamente llega hasta el agua y que la convierte en totalmente accesible.

Además, hay estructuras flotantes que hacen las delicias de los pequeños. Una rampa para echar embarcaciones al agua y un pantalán para amarrarlas completan la dotación. Según Jorge Farofia, uno de los responsables del club náutico, un día entre semana es fácil que acudan unas 500 personas, mientras que los fines de semana la cifra sube a unas 1.500. Como suele ser habitual, el tono de voz en Portugal es tan bajito que ni se nota que en estos momentos ésta sea la playa fluvial de moda en esta zona de Alqueva.

Monsaraz: Esta playa queda a 96 kilómetros de Badajoz, separada por apenas quince minutos de la de Mourao. Ya existía, pero en junio se estrenó totalmente remodelada. Tiene todo tipo de servicios, un amplio aparcamiento y está a los pies de la turística villa de Monsaraz, visita que puede ser el complemento ideal a la jornada.
Monsaraz: Esta playa queda a 96 kilómetros de Badajoz, separada por apenas quince minutos de la de Mourao. Ya existía, pero en junio se estrenó totalmente remodelada. Tiene todo tipo de servicios, un amplio aparcamiento y está a los pies de la turística villa de Monsaraz, visita que puede ser el complemento ideal a la jornada. PAKOPÍ

Tanto la de Monsaraz como la del municipio vecino de Mourao están a menos de cien kilómetros desde Badajoz capital. La de Mourao se abrió al público hace apenas un mes y aprovecha una pequeña península circular que se forma en el Lago de Alqueva. En realidad, falta por acondicionar la otra mitad del círculo, pero el aspecto que presenta este verano ya invita al baño. Mucho más salvaje que la anterior, también tiene una playa de arena traída desde la playa y una generosa superficie de césped con sombrillas y magníficas vistas del lago.

Una pasarela de madera es su signo más distintivo, y aunque dispone de baños y un par de pequeños chiringuitos donde tomar algo, la infraestructura de momento es menor, si bien tiene la ventaja de que hay más árboles que ofrecen sombra. También tiene su propio socorrista, estructuras flotantes para disfrutarlas en remojo y servicio de alquiler de kayacs para darle variedad a la jornada estival. Igualmente, dispone de un pantalán cercano donde amarrar las embarcaciones a motor a pocos metros sin molestar a los bañistas.

Cheles en la orilla española

Dice José Manuel Troca, decidido impulsor de la playa de agua dulce de Cheles, ésta ya en la provincia de Badajoz, que este año se nota menos público en esta orilla española porque la gente está descubriendo estas dos playas portuguesas.

Troca gestiona el chiringuito e innumerables actividades fluviales, desde alquiler tablas de pádel surf a kayaks que suelen alquilar grupos de amigos o hidropedales, los preferidos para dar un paseo en familia. Este año la novedad es que el acceso ha sido asfaltado en la totalidad de los 4,2 kilómetros que separan el agua del pueblo de Cheles. También ha aumentado la superficie de césped.

En cuanto a afluencia, un día de diario de agosto a la hora de comer no suele haber más de veinte o treinta personas, y como esta playa es mucho más grande que las otras parece que esté prácticamente vacía. Los sábados, según Troca, puede haber unas cien personas y los domingos en torno a 250.

Cheles: La localidad extremeña sigue mejorando poco a poco su playa en el lago de Alqueva. Desde este verano su acceso está completamente asfaltado. El público suele ser de Badajoz, pues está a unos tres cuartos de hora en coche por la EX-107.
Cheles: La localidad extremeña sigue mejorando poco a poco su playa en el lago de Alqueva. Desde este verano su acceso está completamente asfaltado. El público suele ser de Badajoz, pues está a unos tres cuartos de hora en coche por la EX-107. PAKOPÍ

En realidad la playa existe desde hace unos nueve años, pero éste es el tercer verano que llevan ofertando una infraestructura mínima para hacerla más atractiva, como arena de playa, merenderos o sombrillas, casi todo gracias a inversiones de la Confederación Hidrográfica del Guadiana y el municipio. Aunque el acceso al agua es más cómodo porque aquí el desnivel es menor que en las dos playas portuguesas, reconoce que hace falta innovar cada año. «Aquí el noventa por ciento del público es de Badajoz capital y como no ofrezcamos cada año algo nuevo los de Portugal nos adelantan.

Es normal, la gente visita los lugares y luego quiere ver cosas nuevas, y si no las hay, pues cambian de sitio. Yo puse una tirolina para las visitas de los colegios en primavera y ahora he sembrado geranios para dar otro aspecto a la zona. Para el año que viene mi idea es poner el chiringuito de caña y cuatro o cinco tumbonas balinesas porque desde aquí se contempla una puesta de sol espectacular».

Junto con esta playa de Cheles, la otra gran infraestructura española que aprovecha las posibilidades de Alqueva está en Villareal, con un restaurante panorámico y un club náutico (Marina de Villareal) que cada año crece y ofrece más actividades. Sin embargo, puertos portugueses como la Marina de Amieira todavía siguen siendo el mejor amarre de la zona.

José Manuel Troca opina que aún queda por hacer. «El diamante lo tenemos, que es el mayor lago de Europa. Eso suena muy atractivo, pero todavía lo tenemos en bruto», afirma.

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