Los mutualistas deben pedir un código al SES para someterse a un cribado
En principio Sanidad indicó que era necesaria la tarjeta de la Seguridad Social, pero ha indicado que es un error y que solo necesitan un número que pueden pedir en el centro de salud
Los funcionarios que no pertenecen a la Seguridad Social, sino a una mutua, deben pedir un código de la Seguridad Social en el centro de salud que tengan más cerca antes de poder acudir a los cribados masivos y voluntarios de coronavirus que se están realizando en toda Extremadura para contener la pandemia.
Según el SES, los mutualistas ya habían sido informados de este requisito, pero muchos llegaron a los cribados sin saber que necesitaban el número. En muchos casos les atendieron, aún sin estar en la Seguridad Social, porque los sanitarios, por su cuenta, les solicitan el número de teléfono para informarles en caso de positivo. Es necesario porque sus datos no están en el sistema general. Según la Consejería de Sanidad, «quienes no tengan un CIP de la Seguridad Social no pueden registrarse, por lo que deben de acudir a su centro de salud más cercano a solicitar un código. De otra manera no puede registrarse su prueba», aseguran.
En principio el SES informó que era necesaria la tarjeta de la Seguridad Social, pero matizó finalmente que solo hay que solicitar un código.
Esta medida ha indignado a los afectados, que aseguran que no habían sido informados. María del Carmen Barbado es docente en Badajoz y el miércoles acudió al cribado del centro de salud Ciudad Jardín. «Cuando llegamos, nos hicieron la prueba, les dijimos que éramos de mutua y, porque lo indicamos nosotros, pero, si no, no tenían forma de llamarnos». En general, este ha sido el caso más extendido. En los cribados no están negando la participación a los funcionarios, pero les requieren sus datos. Esta profesora considera injusto que les pidan un requisito que a otros no. «En los carteles pone que son abiertos y sin cita previa, para todo el mundo».
La medida no afecta al proceso de vacunación porque las mutuas han entregado los datos a Sanidad para que llamen a sus pacientes.
Según el sindicato CSIF, la medida afecta a más de 30.000 funcionarios de Extremadura y a sus dependientes. Las mutuas son Muface, que engloba a los docentes, a la Policía Nacional y al personal de la Administración General del Estado; Mugeju, que incluye los funcionarios de Justicia, jueces y fiscales; e Isfas en la que están los guardias civiles y el ejército.
El secretario general de este sindicato, Benito Román, rechaza que los mutualistas tengan que pedir un código de la Seguridad Social y pide que los cribados sean masivos y con los menores trámites posibles. «Lamentamos la situación porque la pandemia no distingue en qué régimen está un trabajador».
Por otra parte, los cribados continuarán hasta más allá del final de Semana Santa, según anunció ayer el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles. Instó a los extremeños a acudir a los lugares habilitados para realizarse estas pruebas, así como a vacunarse y a respetar las medidas de protección y prevención aplicadas para frenar los contagios. Añadió que las restricciones durarán «el tiempo que sea necesario».