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Monasterio de El Palancar

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

Domingo, 6 de enero 2019, 21:24

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En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
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En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

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EMILIO MARTÍN
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».
En el municipio cacereño de San Pedro de Acín se encuentra el Monasterio El Palancar, fundado por San Pedro de Alcántara en 1557. El conjunto arquitectónico se caracterizan por su simplicidad. Llama la atención a los visitantes por sus escasas dimensiones. Juan de Santa María lo definía como «un lugar con treinta y dos pies de largo y veintiocho de ancho, con una capilla tan pequeña que en ella cabían el sacerdote y el acólito que le ayudaba, si otro alguno entraba ocupaba mucho».

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