Borrar
HOY

Un hotel de Miajadas, epicentro de una organización que ha defraudado 12 millones con tarjetas bancarias

La Policía Nacional y los servicios secretos de EE UU detienen a 105 personas de siete nacionalidades diferentes

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Miércoles, 3 de febrero 2021

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Una red organizada internacional que ha estafado y blanqueado dinero, al menos 12 millones de euros, con epicentro en Miajadas. Allí estaba su centro de operaciones, señala Beatriz Gómez Hermosilla, inspectora de la Policía Nacional. Veinte meses de investigación entre la policía española y el servicio secreto de los Estados Unidos para seguir la pista de empresas y particulares que utilizaron tarjetas bancarias de forma fraudulenta. En el hotel El Cortijo, de esa localidad cacereña de 9.650 vecinos, se produjo un registro el pasado 6 de octubre que se saldó con la detención de uno de sus encargados, natural del municipio miajadeño. Llevaba un ritmo de vida muy alto, muy por encima de lo que podía generar su modesto negocio hostelero. Su detención y el conocimiento del alcance de la trama fraudulenta en la que han detenido a 105 personas (unas 70 de nacionalidad española, el resto griegos, estadounidenses,albaneses, búlgaros, venezolanas y colombianos) en España, Austria, Reino Unido y Grecia ha causado conmoción en este pueblo extremeño que administrativamente pertenece a la provincia de Cáceres aunque está íntimamente relacionado con las Vegas Altas de Guadiana pacense. Una banda que también ha tenido paso por Extremadura con un negocio hostelero arrendado hace unos años en Alange, al lado de Mérida.

Agentes de la Policía Nacional y del Servicio Secreto de los Estados Unidos han llevado a cabo «la mayor investigación de ámbito internacional» realizada hasta la fecha contra el fraude cometido con tarjetas bancarias. La red desmantelada habría defraudado más de 12 millones de euros mediante la creación de empresas fantasma en EE UU para, tras dotarlas de una falsa solvencia económica, solicitar la expedición de tarjetas de débito con el máximo importe disponible con el pretexto de utilizarlas en sus viajes a Europa.

Una vez en España, las tarjetas americanas eran utilizadas en establecimientos cómplices con la organización, que se llevaban un 15% de comisión, por elevados importes mediante el sistema de preautorización, aprovechando la diferencia de aceptación del pago existente entre los bancos americanos y españoles. Mediante este procedimiento lograban realizar importantes compras y posteriormente vaciar las cuentas de efectivo antes de que las entidades bancarias pudieran anular las operaciones. Entre las operaciones constatadas les llamó la atención a los investigadores que una farmacia extremeña pudiera pasar al cobro, en un par de horas, 80.000 euros o un club taurino unos gastos de 300.000 euros. También resultó muy llamativo para la Policía que en pleno estado de alarma, el año pasado, realizaron cargos en hoteles que se encontraban cerrados al público por más de 1,3 millones de euros.

Rafael Pérez, comisario jefe de la Judicial, en el centro; a la izquierda de la foto, Conrad Tribble, de EE UU.
Rafael Pérez, comisario jefe de la Judicial, en el centro; a la izquierda de la foto, Conrad Tribble, de EE UU. EFE

Según la inspectora Gómez Hermosilla, el centro de operaciones estaba en Miajadas no solo con el vecino de la localidad sino un matrimonio griego que también gestionaba el hotel. Antes, la red criminal empezó su andadura en España en el País Vasco (Mondragón) en 2017, «pero después acaban en un pueblo de Badajoz donde alquilan otro hotel pero por desavenencias con el dueño se marchan». Ese pueblo es Alange.

En Miajadas, relata la inspectora, «encuentran el hotel 'El Cortijo' regentado por uno de los investigados, a quien le gusta la vida que le ofrecen y ostentar coches de gama alta y un nivel de vida alto. Ahí llevaban asentados un par de años y tenían intención de expandirse a otras zonas de España«. El hotel miajadeño mantenía abierto al público su cafetería »para no levantar sospechas de inactividad pero en él se refugiaban los principales miembros de la organización, así como otros socios griegos que acudían temporalmente a España a realizar alguna gestión relacionada con el fraude«.

Dinero, tarjetas, armas y datáfonos intervenidos en los registros practicados.
Dinero, tarjetas, armas y datáfonos intervenidos en los registros practicados. HOY

Utilizaban documentación falsa griega y contaban con personal de confianza, todos ellos españoles, que trabajaban para la organización realizando diversas funciones. Por un lado estaban los que captaban establecimientos «conniventes, empresarios o autónomos que permitieran pasar tarjetas americanas en el datáfono» de su comercio a cambio de una comisión del 15% del importe. Una vez se encontrase el dinero en la cuenta del cómplice, éste tendría que reintegrar el 85% restante mediante transferencia bancaria a una de las muchas cuentas que manejaban los principales miembros de la organización tanto en España como en diferentes países de Europa.

Para justificar la supuesta transacción elaboraban facturas falsas a nombre de las mercantiles americanas que figuraban en la tarjeta, con la finalidad de simular haber comprado productos o prestado algún servicio.

Concluye la Policía que los empresarios y autónomos que se han lucrado con la actividad ilegal de la organización son «de todos los sectores, como hostelería, joyerías, empresas de construcción, productos cárnicos, turísticos, alquiler y compraventa de vehículos, maquinaria agrícola, clubes de alterne, azulejos y cerámica, entre otros».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios