La línea de tren convencional de Madrid se adecuará para grandes convoyes de mercancías

Esta actuación forma parte del proyecto para mejorar la vía entre Illescas, en Toledo, y el límite de provincia con Cáceres, en el término de Talayuela. Ante el retraso en las obras de ejecución de la línea de alta velocidad, que actualmente tiene todos los tramos terminados o en construcción a su paso por Extremadura, el Gobierno ha optado por mejorar el tendido convencional en territorio toledano, donde ni siquiera existe un estudio informativo aprobado para el AVE.

Actualmente la línea convencional de tren a Extremadura ya está electrificada entre la capital española y Humanes de Madrid, dentro de la red de cercanías, pero ya está en marcha el proyecto de ampliación hasta Illescas, en Toledo. De ahí que los trabajos se centren entre esa población y Talayuela, donde arranca la plataforma de alta velocidad en la región.

La mejora de la línea convencional contempla la instalación de catenaria. Con ello se cumplirá con lo exigido por la directiva que regula la Red Transeuropea de Transporte, que establece que la red básica, de la que forma parte el corredor Madrid-Extremadura, debe cumplir a 31 de diciembre de 2030 con una serie de requisitos, entre ellos la electrificación.

Entre esos requisitos también se encuentra que la red básica europea debe tener capacidad para trenes de mercancías de 740 metros de longitud, de gran capacidad. Actualmente el máximo permitido en las líneas extremeñas es de 520 metros para composiciones especiales, en la línea de la mayor parte del país. Según la Declaración sobre la Red de Adif, el documento que recoge las características del tendido ferroviario español, sólo se permiten trenes de 750 metros entre Madrid y Valencia y en algún tramo en Cataluña.

Como la línea de alta velocidad no estará terminada en 2030, es necesario adecuar el tendido convencional entre Illescas y Talayuela. Con ese fin, Adif convocó a comienzos de este año un concurso para la tramitación ambiental y la redacción de los proyectos constructivos de la obra de electrificación, con un plazo de ejecución de 36 meses. Ahora se ha sumado un nuevo contrato, para la redacción del proyecto de adecuación de gálibos para analizar si los cerca de 60 pasos superiores del corredor necesitan alguna obra para permitir la instalación de la catenaria.

Este contrato, dotado con 3,8 millones de euros, también se dedicará al estudio de las nueve estaciones comprendidas en este tramo, todas en la provincia de Toledo, entre Illescas y Oropesa (ambas incluidas). La actuación plantea su optimización para facilitar los cruces entre trenes de sentidos opuestos, así como para eliminar las limitaciones de velocidad que están actualmente en vigor para mejorar los tiempos de viaje de las composiciones de pasajeros. Junto a esto, se pretende adaptar su uso por composiciones de mercancías interoperables de 750 metros.

El trabajo deberá proponer actuaciones como la adecuación de playas de vías, la adaptación de longitudes, la renovación de carril, traviesas, sujeciones y desvíos y la habilitación de vías de apartado para trenes de 750 metros de longitud.

Estas mejoras no sólo se plantean para adecuar la línea convencional por el retraso en la alta velocidad, sino que también son necesarias para asegurar en el futuro la circulación de trenes de mercancías entre Madrid y Extremadura por este corredor.

La conexión de alta velocidad con Extremadura partirá de la línea AVE Madrid-Sevilla, ya sea con un enlace en la localidad toledana de Pantoja o aprovechando el ramal que llega a Toledo, que se prolongaría hasta Talavera de la Reina.

Tanto en un caso como en otro hay que buscar una alternativa para los trenes de mercancías, ya que el AVE Madrid-Sevilla sólo está habilitado para pasajeros. Esto obliga a mantener la línea convencional.

Además, la saturación de estas vías por los servicios de cercanías, y el previsible aumento de la demanda, hacen que inicialmente el tendido de alta velocidad entre Madrid y Talavera de la Reina sea sólo para pasajeros. Para las mercancías se adecuará un ramal por las estaciones de Algodor y Castillejo/Añover, esta última en la línea Madrid-Alcázar de San Juan, lo que permitirá además conectar con Valencia y los puertos del Mediterráneo.