Solo el 8% de los extremeños bajo el umbral de la pobreza recibe el ingreso mínimo vital

Ahora el Gobierno central, dentro del plan de respuesta para paliar las consecuencias económicas provocada por la guerra en Ucrania, aumentará la cuantía de esta ayuda en un 15% durante los próximos tres meses. Sin embargo, en esta región muchos de los que cumplen los requisitos todavía no cuentan con el IMV o llevan meses esperándolo.

El año pasado, 25.154 extremeños recibieron el ingreso mínimo vital, con una prestación media de 2.071 euros al año.

En total, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones destinó 52 millones de euros al IMV en Extremadura. Son diez más que en 2020, cuando se beneficiaron del ingreso mínimo 22.526 personas.

Pese a ese incremento, el IMV es insuficiente, ya que en Extremadura hay, según el informe de la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, 297.720 personas bajo el umbral de la pobreza, que se corresponden con casi el 30% de la población total de esta comunidad autónoma.

Eso significa que viven en hogares que están sufriendo una pobreza severa, donde los ingresos no pasan de los 6.417 euros, según los últimos datos de la Encuesta de Condiciones de Vida del INE.

Pero hay más, el indicador Arope creado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, que mide qué personas se encuentran en riesgo de exclusión social y pobreza, tampoco deja en buen lugar a Extremadura. Su porcentaje asciende al 38,7% en esta región y el de la media nacional al 26,4%.

Con esa cifra, esta comunidad presenta la peor situación del país. Los ingresos medios de los extremeños son 9.147 euros al año, la cifra más baja de todas las comunidades autónomas. La media del país es de 12.292, según la Encuesta de Condiciones de Vida.

La cuantía que recibe una unidad familiar por el IMV va desde los 491 euros mensuales para personas que viven solas hasta los 1.081 para familias de dos adultos y tres niños o más. Con la subida del 15% la cantidad será de 565 euros hasta 1.243.

La cifra varía en función de los ingresos y los componentes de la unidad familiar en una ayuda que ha estado cargada de polémica desde sus inicios. «La solicitas hoy, pero te la pueden conceder a los ocho meses», aseguran trabajadores sociales de asociaciones de Extremadura que informan a familias vulnerables. «Faltan recursos humanos en la Seguridad Social para agilizar la gestión de esta ayuda», añaden.

Mientras tanto, para que el tiempo que los solicitantes están a la espera de recibir el IMV puedan tener ingresos, suelen acceder a la renta extremeña garantizada, otra ayuda distinta. «El problema llega cuando reciben el ingreso mínimo vital, que es con carácter retroactivo desde que se solicita. Es en ese momento cuando suben los ingresos y la Junta pide que devuelvan dinero de la renta extremeña garantizada que ya han gastado y no tienen», explican los trabajadores sociales, que creen que es más prioritario que la ayuda llegue a quien la necesita en vez de subir un 15% a quien ya la recibe.

«De todos modos es la primera noticia que tenemos. A nosotros no nos han informado aún», comentaba este martes una trabajadora social que constantemente atiende a personas que preguntan por el ingreso mínimo vital.