Extremadura es la región que menos talento atrae pero la segunda que más logra retener

Tras analizar todos los factores, la comunidad obtiene una nota de 38 sobre 100, mientras que la media nacional es de 49 y la líder, Madrid, roza los 68 (supera a la de Alemania, que también aparece en este trabajo). Extremadura está un punto y medio por debajo de Andalucía y supera a Murcia –que hace cuatro años estaba por delante–, Castilla La Mancha y Canarias, las tres con una puntuación de 30.

El capítulo en el que la región destaca, el de retener, «tiene en cuenta factores que facilitan que el talento no sea expulsado», explican los autores, que son Matilde Mas, Javier Quesada y Fernando Pascual por el IVIE y la Universidad de Valencia, y Aleix Pons e Ignacio Gordo por Cotec, «una organización privada sin ánimo de lucro cuya misión es promover la innovación como motor de desarrollo económico y social en España», cuyo presidente de honor es el Rey y que existe también en Italia y Portugal.

A la hora de no dejar escapar el talento, solo Navarra supera a Extremadura: 75,1 frente a 69,5 como nota media. Para llegar a esta puntuación se analizan seis valores relacionados con la sostenibilidad y tres con el estilo de vida. Estos últimos son la ratio de médicos por cada 100.000 habitantes, un baremo en el que Extremadura ocupa el noveno puesto nacional, la dotación sanitaria, en la que aparece en el quinto puesto, y el tiempo invertido en ir a trabajar, valor en el que la región es la mejor del país.

También lo es en polución ambiental y en gasto público en salud, dos de los seis valores relacionados con la sostenibilidad. Los otros cuatro son la protección social (Extremadura logra la quinta mejor puntuación del país), energías renovables (octava), sostenibilidad de las finanzas públicas (duodécima) e inversión en protección ambiental (penúltima).

El mayor déficit extremeño en este análisis es su incapacidad para atraer talento, un aspecto en el que ocupa el farolillo rojo nacional. En esto influyen «el flujo de inversión extranjera directa en sectores de alto valor añadido, la presencia de empresas extranjeras, de estudiantes internacionales o la proporción de extranjeros con estudios superiores». También «la apertura interna, es decir, la oportunidad de liderazgo de las mujeres o la brecha salarial». En capacidad para atraer talento mandan Madrid, Navarra y País Vasco.

Extremadura es penúltima en el capítulo denominado 'Conocimiento', que analiza la población con educación superior, el número de investigadores, la disponibilidad de científicos e ingenieros, el porcentaje de altos directivos, la exportación de alto valor añadido, el gasto en actividades innovadoras y la inversión en intangibles. Es igualmente penúltima en 'Capacidades y vocaciones técnicas', que «mide el perfil de la población activa, tanto sus cualificaciones como su productividad, la empleabilidad o la correspondencia entre cualificación y ocupación».

La comunidad es cuarta por la cola en el capítulo que los investigadores denominan 'Crecer', que examina el gasto en educación, los resultados del informe PISA, el rendimiento de los sistemas universitarios, la formación en la vida laboral o la tasa de riesgo de pobreza. Y ocupa este mismo puesto en el epígrafe 'Facilitar', que estudia «tanto el entorno del mercado como el de negocios y el mercado de trabajo». Para ello, examina el número de infracciones penales, el gasto en I+D (investigación y desarrollo), las infraestructuras TIC, la utilización de tecnología, la vulnerabilidad de las empresas y de los trabajadores, el teletrabajo o el precio de la vivienda».

Al valorar los resultados de la investigación, los autores del Mapa del talento resumen los puntos fuertes y débiles de cada comunidad autónoma. Y en el caso extremeño, destacan variables como el gasto público en salud, la protección social, el tiempo invertido en ir a trabajar, el precio de la vivienda, la baja criminalidad, la menor exposición a sectores vulnerables y también el hecho de que presente la menor brecha salarial del país. Sobre esto último, no obstante, matizan que «no viene acompañado por mayores oportunidades de liderazgo para las mujeres en el ámbito empresarial».

En el otro lado de la balanza, el de las debilidades, mencionan el ámbito de la educación formal, al que califican como «asignatura pendiente, con peor desempeño de los alumnos de Secundaria y su sistema universitario». También resaltan «la posición desfavorable en la cualificación de los niveles superiores de conocimiento y en impacto del talento», y el hecho de que aparezca «rezagada en variables como la disponibilidad de científicos, graduados STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), exportaciones de valor añadido o inversión en intangibles».

Por último, los expertos del IVIE, la Universidad de Valencia y la Fundación Cotec recomiendan a Extremadura «elevar la productividad como herramienta para reducir la tasa de pobreza».