La estampa extremeña que eternizó Sorolla
Sucedió en Extremadura ·
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Cotidianeidad. El pintor inmortalizó una jornada placentina bañada por un atardecer otoñalNecesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Sábado, 1 de agosto 2020, 20:46
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Comparar 'El Mercado', la litografía placentina de Sorolla, con la vista actual de la ciudad, resulta un juego delicioso y harto entretenido para estas calurosas tardes de agosto. Deleitarse con la maestría de los trazos, la ausencia de vehículos, los hermosos cerdos negros o las facciones de los personajes y acto seguido, posar la vista en el panorama contemporáneo, para decidir, por unos minutos, quedarnos a vivir en la pintura.
Hace 103 años, el maestro Joaquín Sorolla arribó a Extremadura con el recado de plasmar a pinceladas la España más rural. Se lo había encargado el multimillonario americano Archer Huntington dentro de una serie de 14 lienzos denominada 'Visiones de España'.
Sorolla llegó a la región por primera vez en enero de 1917. Paró en Mérida y en Cáceres, pero fue Plasencia el lugar que despertó su inspiración. Quizás le ayudaron el puñado de montehermoseños que cada martes acudían al mercado, formando una pintoresca estampa. Sin embargo, debido al frío, abandonó Extremadura y volvió en octubre. Fue en esta segunda visita cuando, en menos de dos semanas, pintó 'El Mercado'. Concretamente del 25 de octubre al 4 de noviembre.
La obra plasma el trasiego de una jornada cualquiera en el mercado placentino. En primer plano, al inicio del puente de Trujillo, una piara de cerdos, vendedores con sombrero de ala ancha y montehermoseñas ataviadas con sus sombreros típicos. Al fondo destacan la Catedral, el Palacio del Obispo y la muralla. Pero sin duda, uno de los elementos más hechizantes del cuadro es su luz. De hecho, el propio Sorolla reconoció que le había fascinado el «hermoso conjunto de Plasencia iluminado por el sol de la tarde».
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