CSIF Extremadura apoya las protestas de los docentes en defensa de Muface

En apoyo a las protestas de los docentes, el sindicato CSIF de Extremadura ha acompañado a los afectados en su rechazo a la posibilidad de que el mutualismo administrativo desaparezca, después de que las aseguradoras rechazaran la oferta 'insuficiente' del Gobierno central para renovar el concierto.

Antonia Paredes, delegada de CSIF Educación en Extremadura, ha destacado que «la solución no pasa por acabar con Muface, sino por reforzarlo y modernizarlo de forma inmediata». Paredes ha advertido que la eliminación del sistema podría poner en riesgo la atención sanitaria de más de un millón de empleados públicos y sus familias en todo el país. Además, ha reclamado al Ministerio de la Función Pública que realice una nueva licitación con las aseguradoras para garantizar la continuidad de Muface, un modelo que ha demostrado ser eficaz desde su creación en los años 70.

El sindicato muestra su preocupación por las consecuencias que esta posible integración podría tener para los mutualistas, especialmente para aquellos que se encuentran en tratamientos médicos. Paredes ha señalado que ya se están anulando citas y denegando autorizaciones para pruebas médicas, lo que aumenta la incertidumbre entre los afectados. Además, ha criticado que algunos pacientes, como los que están siendo tratados por cáncer, no saben qué sucederá con sus tratamientos si se integran en el sistema de sanidad pública.

Además, se ha recordado que el modelo actual resulta más económico para el Ministerio de Sanidad, ya que el coste de un mutualista es de 1.000 euros, frente a los 1.700 euros que cuesta un usuario del sistema público. Esta diferencia de coste se debe a que el 94% del gasto sanitario lo cubren los propios mutualistas a través de sus cotizaciones.

En el manifiesto en defensa de Muface, que se ha leído en las concentraciones se recoge que la pertenencia a esta mutua «no es una elección voluntaria» sino «una obligación impuesta a los funcionarios del Estado». «La libre elección sanitaria no puede considerarse un privilegio, sino un derecho irrenunciable que debe preservarse», recoge el texto, que añade que «durante años, Muface ha sido víctima de la dejadez de quienes debían protegerlo».

«No vamos a aceptar medidas que impliquen una improvisación temeraria ni la vulneración de nuestros derechos. La sanidad es uno de los pilares esenciales de nuestra sociedad, y cualquier reforma que le afecte debe hacerse con responsabilidad, planificación y en cumplimiento de los compromisos ya adquiridos», añade el manifiesto en defensa «de una sanidad de calidad para todos».