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Celestino J. Vinagre
Martes, 17 de junio 2014, 00:11
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Sin lista provisional de solicitantes admitidos y tampoco sin noticias de cuándo pueden ser los exámenes, ni siquiera de forma aproximada. La incertidumbre se afianza entre los miles de aspirantes a las 576 plazas de la Administración general que saca la Junta correspondiente a las convocatorias públicas no desarrolladas de 2010 y 2011. Unas oposiciones que se presumen multitudinarias, aunque sin datos que confirmen ese masivo interés ciudadano. El Gobierno regional no ha concretado el número de inscritos a pesar de que el plazo para el registro de solicitudes acabó en enero. Los sindicatos dicen que no tienen información sobre la situación real del proceso, entienden que falta personal en la Administración autonómica para acabar con lo que entienden como atasco y demandan celeridad al Ejecutivo para que la fecha de los exámenes se conozca cuanto antes.
El 11 de octubre pasado, en el consejo extraordinario celebrado en Plasencia, el gabinete de Monago anunció que se convocaba una oferta pública de 576 plazas. Los sindicatos y la Junta consensuaron las bases de la convocatoria. Y en vísperas de Navidad, el consejero de Administración Pública, Pedro Tomás Nevado-Batalla, indicó que los primeros exámenes se realizarían después de la tercera semana de abril, esto es, después de Semana Santa, y los últimos en octubre.
«Es evidente que la tramitación administrativa de las solicitudes no ha sido lo rápida que esperaba el consejero aunque a nosotros sinceramente no nos ha sorprendido», explica Juan José Samino, de CSI-F. «Nos da la sensación de que el proceso está un poco atascado, no solo por las solicitudes en sí sino también porque creo que, tras la experiencia vivida con las oposiciones del SES, quieren acertar con la configuración de los tribunales», añade.
Para Salazar el proceso de depuración de las solicitudes va lento y, por tanto, las oposiciones van «muy retrasadas. Quizás les ha cogido de sorpresa la masiva presencia de aspirantes pero cualquiera podía imaginar que en la situación laboral actual iban a ser miles las personas que se presentarían». Para la responsable de CC OO, parte de ese retraso está en que hay poco personal en la Dirección General de Función Pública. Una apreciación en la que coincide Samino. «Además, el proceso no es sencillo y si encima no hay trabajadores suficientes para darle un empujón es normal lo que está pasando», añade.
Las solicitudes se han debido cumplimentar de forma telemática. Una vez realizado ese trámite, se tuvieron que imprimir, registrar y abonar las tasas. En teoría, sobre mediados de marzo iba a estar la lista de admitidos y excluidos. Y quince días después llegaría la lista definitiva. No ha sido así. «Hemos preguntado, pero no sabemos en qué punto se está», agregan los sindicalistas.
HOY ha preguntado a Administración Pública sobre el desarrollo de las oposiciones y previsión de fechas tanto para saber la lista final de solicitantes como para los exámenes. No ha obtenido respuesta.
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