Teléfono y WhatsApp para llevar la tienda de barrio a casa en Don Benito

Son clientes fieles, pero ahora le toca memorizar nuevos nombres que llegan sobre todo por teléfono para un servicio a domicilio que ya realizaban antes, pero que ahora ha aumentado tanto que han tenido que ampliar horario y recursos humanos. «Los clientes están asustados y prefieren recibir el pedido a domicilio para evitar colas, esperas o aglomeraciones, es mucho más práctico y seguro», afirma.

Pero el teléfono no evita esas charlas que son habituales frente al mostrador. «Hay mucha gente mayor que, desgraciadamente, está aislada y sola en casa, y esas llamadas para hacer los pedidos se convierten en largas conversaciones, como una terapia». Llamadas que han aumentado, al igual que las ventas. «Lo que por un lado hemos perdido en hostelería y restauración, se ha compensado con el servicio a domicilio y también en el establecimiento porque el trato es muy especializado y evitas las grandes colas», concluye mientras desinfecta un datáfono que también está siendo protagonista estos días.

Y es que, la gente prefiere evitar contacto con el dinero, algo que también ha notado Juani Espino en su tienda y en los repartos. «Hay muchas casas donde dejo la compra en la puerta y ni veo a los clientes, pagan con transferencia», cuenta desde su pequeña tienda, Alimentación Mendoza, que en las últimas semanas ha incorporado productos sin lactosa o sin gluten, para los que antes no tenía demanda. «Somos las tiendas de los olvidos, aquí solo se viene porque se te ha olvidado la sal, el azúcar...», lamenta, «pero ahora tenemos que aprovechar, podemos hacer algo más y no hay que desperdiciar la ocasión de fidelizar a estos clientes».

En casa, mientras, esperan sus dos hijos, a los que apenas ve para comer y cenar. «Nos falta poner aquí la cama», cuenta ya con bastante cansancio acumulado. Pero el esfuerzo no está siendo sólo físico, también económico: «Muchas familias viven al día, sin recursos para afrontar esta situación, por eso llega gente a la que he fiado con la promesa de 'Hazme el favor, Juani, que cuando me paguen lo del ERTE yo te lo pago'. Estamos ayudando a mucha gente que hasta hace unos días solo venía a comprarte el pan».

Antes ya hacían reparto a domicilio, pero no imaginaban que llegarían a recibir las listas de la compra por WhatsApp. Muchos tendrán memorizado el número como Juani o Paco, otros como 'La tienda del barrio' que no quiere volver a ser 'La tienda de los olvidos'.