Merino no hace bueno el dicho

Para su estreno en el banquillo celeste, Diego Merino apostó por un 4-1-4-1. Como único mediocentro actuaba Alberto; mientras que el hombre más adelantado era Nané. Otra característica que parece querer inculcarle el nuevo preparador al Coria, son las posesiones largas y la movilidad de los hombres de segunda línea. Y es que los cuatro futbolistas que actuaban por detrás del mencionado Nané, tras tocar el balón, permutaban su posición constantemente. Una propuesta atractiva y entretenida, a la que solo le faltó verticalidad, y sobre todo, finalización. Las buenas intenciones de la escuadra cauriense murieron en la frontal del área rival, donde la zaga local se mostró expeditiva, impidiendo que los atacantes les superaran.

En líneas generales, fue un buen partido para el espectador. A pesar de su mala situación clasificatoria, ambos equipos apostaron por jugar y desplegar un buen fútbol. El control territorial del choque correspondía al conjunto visitante, con mayor posesión y presencia en campo contrario. Por su parte, el filial se veía obligado a salir a la contra, alternando el juego directo cuando la defensa del Coria estaba adelantada, con el fútbol combinativo cuando el equipo de Merino estaba bien posicionado.

Al partido solo le faltó que se vieran más ocasiones de gol, y esto fue debido a que a ambos equipos les costó un mundo pisar las áreas, al errar normalmente en el último pase. Debido a ello, unos y otros apostaron más de lo habitual por los disparos desde fuera del área. En este sentido, destacó Nané, con tres remates lejanos que se toparon con la oposición del cancerbero Álex Ruiz.

A falta de nueve minutos para el descanso se adelantó el filial alfarero, en una acción a balón parado. Piri botó un córner al área de un inédito Toni Varea y Berlanga lo cabeceó a las mallas, cruzando el balón del primer palo hacia el segundo. Poco después, el que cabeceó al fondo de la red en una acción a balón parado fue Sergio Gómez, pero su tanto fue anulado por fuera de juego.

Tras el paso por vestuarios, el Coria regresó mejor al césped. Muy decidido a buscar la portería contraria, en los primeros cinco minutos dispuso de dos ocasiones muy claras para empatar. Primero, en un mano a mano de Santi Luque del que salió vencedor el cancerbero Álex Ruiz; y poco después con un balón a la cruceta de Nané.

Parecía que pintaba bien la segunda mitad para el Coria, pero a medida que fueron transcurriendo los minutos, el rendimiento del conjunto celeste decayó. Y aunque Diego Merino trató de darle otro aire a su equipo, lo cierto es que los cambios no le sentaron nada bien al cuadro cauriense. Sin grandes alardes, y con un juego más vertical, el Alcorcón B comenzó a poner en muchos apuros a la zaga visitante.

Los últimos minutos fueron de ida y vuelta. El Coria, volcado con todo, ante un filial partido en dos, que hacía intuir un gol en cualquiera de los dos bandos, como así ocurrió. En el quinto minuto de los seis de añadido, en un tres para uno, Nico remató solo contra Toni Varea, que sacó su disparo con una gran parada. Sin embargo, el balón muerto le cayó a Berlanga, que a puerta vacía, no tuvo más que empujar el balón para establecer el definitivo 2-0 con el que concluyó el encuentro.