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Marrero, en su presentación ayer en Almendralejo. :: extremaduraud
«El equipo tiene mucho margen de mejora»
TERCERA

«El equipo tiene mucho margen de mejora»

El Extremadura presenta a Juan Marrero, el técnico que condujo al club azulgrana desde Preferente a Segunda B

J. B. M.

Martes, 7 de abril 2015, 02:47

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Con un semblante más relajado que el de la tarde anterior compareció ayer el director deportivo del Extremadura UD, Fran Escudero. En esta ocasión, la cita en la sala de prensa del Francisco de la Hera iba dirigida a inaugurar oficialmente el regreso de Juan Marrero a la entidad azulgrana.

Juan Marrero Roig (Quart de Poblet-Valencia), de 46 años, vuelve a la que fuera 'su casa' avalado por un brillante historial, habiendo dirigido con éxito a varios equipos extremeños tanto de Tercera como de Segunda B. El técnico valenciano puede presumir de haber celebrado hasta cinco ascensos. De hecho, en su anterior etapa en Almendralejo consiguió dos de forma consecutiva, llevando equipo azulgrana desde Regional Preferente hasta la Segunda División B.

Como el propio Escudero apuntó, el nuevo técnico «no necesita mucha presentación», se trata de un hombre que «ya conoce la casa» y en el que «hemos confiado plenamente para que nos devuelva la ilusión y para afrontar el final de temporada en las mejores condiciones posibles».

Por su parte, el protagonista se mostró «ilusionado y con muchas ganas». Después de un año alejado de los banquillos, «salgo de la jaula con un ímpetu maravilloso» y «agradezco al Extremadura que me dé esta oportunidad en un proyecto que conozco perfectamente y del que sé su potencial».

Primer vistazo

En relación a cómo se ha encontrado a su nuevo equipo el entrenador tras dos sesiones de entrenamiento, Marrero comentó que «el viernes los jugadores estaban tocados porque son humanos y les afecta la destitución del entrenador pero son profesionales y se deben a este club, por lo que tienen que darlo todo. En lo anímico lo van a conseguir y en lo físico igual les cuesta un poquito más pero confío plenamente en ellos, conozco a la mayoría y sé de su potencial humano, físico y futbolístico. Estoy segurísimo de que el equipo tiene mucho margen de mejora».

Con respecto al sorprendente empate a tres final que presenció el domingo desde el palco, Marrero comentó que a su equipo «las segundas partes le cuestan mucho, se nos acaba la gasolina y eso en abril lo tenemos que mejorar. Además, el estado mental del futbolista también hay que trabajarlo, tenemos que apoyar al futbolista e ir todos juntos». En este sentido, el técnico no quiso dejar pasar la oportunidad de hacer un llamamiento a la unidad: «Creo que es un proyecto que nos tiene que unir a todos, junta directiva, cuerpo técnico, jugadores y medios de comunicación, porque todos representamos la ciudad de Almendralejo».

Con diez puntos de desventaja sobre el Mérida, el objetivo del campeonato «está muy complicado pero nosotros vamos a salir a ganar todos los partidos porque este proyecto y esta ciudad así lo exigen. El objetivo es quedar lo más arriba posible, sin descartar el primer puesto mientras matemáticamente sea posible».

La segunda etapa de Juan Marrero al frente del banquillo del Extremadura tendrá el domingo un estreno tan difícil como ilusionante, nada menos que el partido ante el líder en el estadio Romano de Mérida. Avisa el preparador a su rival de que «este equipo va a subir seguro en siete días y va a competir allí como si fuera el último partido, es lo mínimo que tiene que hacer».

El técnico se mostró seguro y confiado en revertir la situación porque «de lo contrario no estaría aquí». El equipo técnico que le acompañará será corto ya que «los protagonistas deben ser los jugadores» aunque confirmó que seguirán junto a él tanto Pedro José como Domingo Durán.

Por último, Marrero dejó claro que quiere que «la afición vibre con su equipo, los aficionados tienen que estar identificados con los jugadores. Aquí ha habido partidos en los que se ha perdido y la gente se ha levantado a aplaudir porque lo han dado todo y eso es lo que tiene que hacer un jugador, dar hasta la última gota de su sangre».

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