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RAÚL PEÑA
REUS
Sábado, 17 de noviembre 2018
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Los adjetivos para describir el juego, la influencia y la importancia de Enric Gallego en el Extremadura se acaban. Es un jugador superlativo que andaba escondido en Cornellá hasta que el conjunto azulgrana apostó por él en el mercado invernal de la temporada pasada. Y menos de un año después se ha encontrado con un futbolista que es, ahora mismo, lo mejor de la Segunda División. El cénit -de momento- de su rendimiento llegó en Reus, donde consiguió cuatro tantos para darle la segunda victoria fuera de casa al Extremadura esta temporada y la primera con Rodri en el banquillo azulgrana.
Y es que Enric Gallego marcó goles de todos los colores. El primero tras superar a un central en un salto, el segundo tras superar al portero en un centro lateral, el tercero después de ser el más listo de la clase y robarle la cartera a la defensa del Reus y el cuarto tras regatear a los dos centrales y matar al Reus con un disparo raso imparable para Edgar Badía. Recital de Enric Gallego que, si antes había despertado el interés de grandes equipos, ahora llama a la puerta de la élite sin complejos. Y todo esto con 32 años.
Pero no solo Enric Gallego estuvo a un alto nivel. Del partido de Reus salen reforzados muchos jugadores, como Pardo, que completó un gran choque, o Chuli, que dio la talla hasta que se tuvo que retirar lesionado. El 4-4-2 de Rodri le dio más empaque defensivo al equipo y mucha verticalidad en ataque.
El partido no empezó bien para el Extremadura, que de nuevo concedió un gol tras un fallo defensivo y tras ver cómo le anulaban un gol a Chuli. De nuevo, y por enésima vez, el Extremadura volvió a conceder un tanto tras un fallo defensivo grosero. Esta vez le tocó a un futbolista que no suele fallar, Olabe, que le regaló un balón a Linares cuando intentó tocar atrás para Íñigo López. Linares, un jugador que sabe de qué va esto del fútbol, esperó la llegada de Ricardo Vaz por su izquierda para combinar con el extremo portugués del Reus. Y desde la frontal, tras controlar el esférico, le pegó duró para colar el balón en la meta de Álvaro Fernández tras tocar en el larguero. Y, de nuevo, el Extremadura se veía obligado a remar contra corriente.
Reus
Edgar Badia; Ángel Bastos, Jesús Olmo, Catena, Borja Herrera; Juan Domínguez, Gus Ledes (Carbonell, min. 80), Mario Ortiz; Ricardo Vaz (Alfred Planas, min. 80), Miguel Linares y Fran Carbia (Rubén Enri, min. 72).
1
-
4
Extremadura
Álvaro Fernández; Álex, Pardo, Íñigo López, Pomares; Valverde(Granero, min. 72), Olabe, Fausto, Kike Márquez (Diego Capel, min. 83); Enric Gallego y Chuli (Willy, min. 54).
Goles: 1-0, min.12: Ricardo Vaz. 1-1, min. 44: Enric Gallego. 1-2, min. 56: Enric Gallego. 1-3, min. 65: Enric Gallego. 1-4, min. 84: Enric Gallego (min.84).
Árbitro: Santiago Varón Aceitón (comité balear). Mostró cartulina amarilla a Gus Ledes (min.31) y a Jesús Olmo (min.56) por parte local.
Incidencias: Estadi Municipal de Reus. Unos 2.900 espectadores. En las gradas se notó la presencia de unos 40 aficionados azulgranas.
Como siempre, Enric Gallego salió al rescate cuando el equipo azulgrana se iba a vestuarios un gol por debajo en el marcador. Pero entonces, el de siempre, el pichichi, el jugador que sirve de ancla en este equipo, aprovechó un grandísimo centro lateral de Álex Díez para ganarle la posición a Olmo y, con una fuerza tremenda, rematar a gol el cuero cedido por el lateral derecho.
En la segunda parte, la afición desplazada al Estadi Municipal de Reus presenció un espectáculo. Enric consiguió tres goles más para certificar la victoria de su equipo. La segunda parte comenzó fría, como si los dos equipos se estuviesen midiendo como lo hacen dos boxeadores en los instantes iniciales de un combate. Pero Enric no sabe de tanteos y, a los 12 minutos de la reanudación, inclinó la balanza para los visitantes. El delantero aprovechó un centro de Olabe para peinar el esférico ante la salida de Edgar Badía. El Extremadura ya estaba donde quería, por delante en el marcador.
A partir de ahí esperó paciente su momento mientras el Reus quería llegar a la portería de Álvaro Fernández tocando la pelota. Y, como hacía Muhammad Ali, Enric picó como una abeja. El pichichi de la categoría le robó el cuero a la defensa local, se plantó ante Edgar Badía y marcó el tercero en su cuenta particular tras regatear al portero.
La victoria ya estaba en el zurrón azulgrana, pero Enric quería más. Él solo, sobrado, peleó un esférico a cinco minutos del final. Se lo llevó, cómo no, se fue de Olmo y de Catena y marcó el cuarto tanto con un disparo cruzado raso y potente.
A partir de ese momento los focos se centraron en Enric Gallego. Un jugador que debutó hace unos meses en Segunda División, que es pichichi sobrado de la liga y que, a sus 32 años, llama a la puerta de la élite con un ariete. No se sabe cuánto durará en Almendralejo, pero al Extremadura y a su afición solo le queda disfrutar mientras tanto. No es para menos.
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