Borrar
¿Qué ha pasado hoy, 27 de marzo, en Extremadura?
Espinar celebra con José Ángel uno de los tantos del Villanovense ayer en el Romero Cuerda. :: R. M.
El Villanovense recupera su identidad
segunda b

El Villanovense recupera su identidad

Gana al San Roque en un partido muy completo donde recuperó su eficacia de cara al gol y su robustez ante su público

RODRIGO MORÁN

Lunes, 16 de marzo 2015, 07:42

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El Villanovense ya tiene licencia para soñar. La victoria ante el San Roque de Lepe en uno de sus mejores partidos a nivel ofensivo permite a los serones dejar la permanencia virtualmente cerrada. Todavía quedan dos puntos para los ansiados 45, pero si las matemáticas del pasado no fallan, la permanencia es un hecho. El triunfo también deja a los de Cobos más cerca de sus opciones de Copa. Y, por supuesto, no descartar nada más. Vuelve a ser sexto y sólo tiene a un puntola fase de ascenso. La temporada está siendo para enmarcar.

Matemáticas al margen, sobre el pasto el Villanovense volvió a mostrarse lúcido en ataque, robusto en la medular y bastante consistente en todas sus líneas. Encajó dos goles, pero menudos dos golazos le cayeron a Álvaro Ratón, sustituto de Fuentes. Volvió a ofrecer el Villanovense un fútbol alegre, sin complejos, generador de oportunidades y, en esta ocasión, con acierto en la definición. Cobos, en su faceta más innovadora, sorprendió dejando en el banquillo a Anxo y colocando a Javi Sánchez de lateral derecho, en detrimento de Moraga. No le salió mal del todo porque el equipo hizo una gran primera parte, pero cierto es que Javi sufrió las embestidas de Mustafa por el costado izquierdo y acabó en siendo sustituido al descanso al contar con tarjeta. El Villanovense ganó el centro del campo de primeras y ahí cimentó su fortaleza para apenas sufrir durante todo el encuentro.

Inicio fulgurante

Metió mucho carbón de inicio al partido el Villanovense. Carlos Fernández tuvo la primera nada más arrancar el partido, pero no supo remachar una dejada de cabeza de Pajuelo dentro del área. Minutos después, un disparo lejano de Curro tocó claramente en la mano de Súper, pero el colegiado no apreció infracción dentro del área. Al poco tiempo, no hubo más avisos. Salvi, eléctrico y desbordante, rompió a su par por banda derecha y fue trabajado dentro del área. Penalti claro. Tapia tomó la responsabilidad y ejecutó a la perfección para adelantar al Villanovense.

Encendido el botón de intensidad máxima, el Villanovense se lanzó a por el partido para cerrarlo de inmediato, pero se encontró con un golpe inesperado del San Roque. Mustafa, el mejor de largo de los onubenses, agarró una pelota en el vértice izquierdo y se sacó un derechazo a la escuadra contraria que enmudeció al Romero Cuerda. Un auténtico golazo. Tocaba remar de nuevo.

El San Roque sólo incomodaba a cuentagotas y a chispazos. Su juego carecía de continuidad porque el Villanovense fundía sus plomos en la medular. Una vez repuesto del golpe, los de Cobos fueron poniendo cerco a la portería rival con acercamientos. Centros laterales, faltas de larga distancia, balones en largo a Carlos Fernández. Un amplio abanico de opciones que terminaron con premio. En una jugada larga de ataque, Curro puso un centro magnífico al corazón del área y Espinar, adelantándose a la defensa, oriento el golpeo para marcar un fantástico gol. Celebración con rabia del delantero andaluz que rompía así su sequía de siete partidos sin marcar. Un gol, justo antes del descanso, que hizo daño al San Roque.

Salvi lesionado

El decorado de la segunda parte no varió en exceso. El Villanovense mantenía el dominio y las mejores oportunidades. El San Roque, en cambio, permanecía agazapado esperando alguna oportunidad aislada, pero sin mucho arsenal futbolístico. Cierto es que, cuando llegaba al área, siempre lo hacía con peligro y buenas intenciones.

La mala noticia la protagonizó Salvi. En un centro desde la banda izquierda, el extremo remató incomodado por un defensa y en la caída se lesionó. Una luxación en el codo que le obligó a retirarse en camilla. A lo largo de la semana se someterá a más pruebas para dictaminar el tiempo exacto de baja.

Como viene siendo habitual, el Villanovense manejó a su antojo el partido. Decreció el ritmo, que no la intensidad, y suyas fueron las mejores opciones. Tras un saque en largo de Álvaro Ratón, Espinar peleó con el portero Isaac, le ganó el salto y disparó a puerta vacía, pero un defensa impidió el gol sobre la línea. Seguidamente, un chut de Anxo hizo volar a Isaac en una estratosférica parada. Fue el preludio del gol. En ese saque de esquina, José Ángel la puso medida y Carlos Fernández se coló entre una melé de cabezas para rematar el tercero. Un gol que hacía justicia al partido.

Parecía tener el encuentro un final tranquilo, pero no existen este tipo de finales en el Romero Cuerda. Juan Gómez, con mucha calidad, caracoleó en tres cuartos de campo y, de buenas a primera, se sacó un zurdazo a la escuadra de Álvaro Ratón ante el que nada pudo hacer el cancerbero local. El 3-2 hizo pasar por algún que otro sufrimiento al Villanovense, pero entre Ratón y la defensa, abortaron las últimas embestidas del San Roque.

El Villanovense recupera su identidad en casa. Vuelve a ganar tirando de garra, inteligencia y acierto. Pronto se dejará de hablar de la permanencia. Los objetivos están cambiando.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios