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El Cacereño sale sin ambición y goleado
segunda b

El Cacereño sale sin ambición y goleado

Los de Ángel Marcos aguantaron al Almería B mientras las fuerzas les acompañaron

PABLO LAYNEZ

Lunes, 19 de enero 2015, 07:49

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El Cacereño pagó su excesivo conservadurismo con una goleada, que si bien parece abultada por los méritos contraídos por el sistema defensivo de Ángel Marcos, es el reflejo de 90 minutos carentes de ambición frente a un Almería B que fue a por la victoria en todo momento.

El Cacereño sufrió la calidad de Dani Romera, convocado con el primer equipo en Mestalla, sobre todo el central Salva, al que le hizo la vida imposible. Los dos goles del ariete destrozaron a un batallador conjunto extremeño, que si bien tuvo alguna ocasión en la primera parte y se defendió al límite del reglamento, se vino abajo en cuanto el cansancio le hizo mella y los espacios comenzaron a ser autovía para los rojiblancos. Romera y Puertas eran bólidos para la defensa cacereña.

Ángel Marcos tenía bien estudiados a los rojiblancos, a los que le suele costar 'abrir el melón' y situó hombres muy pegados a los dos grandes creadores del equipo: Iván y Puertas. Esto provocó que Hicham, por ejemplo, tuviera más espacios, pero no estuvo acertado. Un buen pase en profundidad lo despejó el meta Vargas ante la temerosa llegada del marroquí. Minutos después, el propio delantero chutó desde la frontal para que el portero visitante sacara una buena mano abajo.

Aunque las defensas se estaban imponiendo, las pocas ocasiones que hubo antes del descanso fueron claras. Y ahí también salió a relucir Gianfranco, cuando se lució tras una gran volea de Zamora desde la frontal que iba pegada al palo. El argentino voló y evitó males mayores para su equipo.

El colegiado no paró de erigirse en protagonista llevándose el silbato a la boca constantemente. Un barullo dentro del área acabó con un chut de Hicham que saca bajo los palos Salva. Un último ¡uy!, que en la segunda parte se convertiría en gol. El conjunto verde había conseguido su objetivo al intermedio: mantener la portería a cero.

Tras el descanso, los rojiblancos fueron un ciclón. Mientras al Cacereño le duraron las fuerzas y mantuvo el orden, el Almería sólo mostraba las uñas, pero al primer fallo, zarpazo. Salva se confió, Romera se la robó en el área y con un latigazo batía a Vargas cruzado. Tan sólo dos minutos después, la conexión almeriense Puertas-Romera iba a hacer el segundo con un gran pase del de Benahadux al de La Cañada, que define abajo y con clase. El partido en un suspiro quedó finiquitado.

El encuentro estaba acabado pese a la expulsión de José Ángel. El Cacereño había tirado la toalla al ver que Gianfranco era inexpugnable, Valverde así lo comprobó al encontrarse con otra parada de reflejos felino tras un chut a bocajarro en el área grande. La guinda la puso Puertas, tras otro genial pase a la espalda visitante de Rubén, y un gol de torero con regate incluido a Vargas, con el 3-0.

El Cacereño acabó con toda la artillería en el terreno de juego, pero en cuanto defensivamente se vino abajo, quedó a merced de un conjunto rojiblanco que no le dejó meterle mano y que supo frenar su juego duro. Las contradicciones arbitrales no influyeron en un resultado justo y claro que dejan a un conjunto extremeño al borde del abismo clasificatorio, a tan solo un punto del descenso.

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