Contempopránea se despide tirando de marca personal

La Alcazaba de Badajoz despidió ayer otro año más Contempopránea como aperitivo de lo que se espera en Alburquerque el próximo mes de julio.

En una noche algo menos fresca que el viernes, el escenario pacense reunió desde primera ahora del sábado a un público distinto al que lo hizo la víspera.

El cartel del sábado reunía a grupos de primera línea de la música indie nacional y la mayoría de ellos ya había pasado por el escenario del castillo de Luna pero les faltaba estrenarse en Badajoz.

Con la actuación de Señor Chinarro a partir de las diez de la noche, el foso empezó a animarse de incondicionales del autor sevillano y ya no paró de llegar gente hasta que le tocó el turno a Lori Meyers, cabezas de cartel del festival y uno de los grupos más esperados del fin de semana junto a Amaral, que actuó el viernes.

Habrá que hacer el amor por un mundo mejor, se despidió Antonio Luque, alter ego de Señor Chinarro con su tema Una llamada a la acción para dar paso a León Benavente, que gustó a partes iguales a los que ya le conocían de otros festivales como a los que nunca habían oído hablar de ese grupo cuyo cantante meneaba su melena platino como un esquizofrénico mientras tocaba el teclado. Temas como Ánimo, valiente, Ser Brigada Revolución o Gloria levantaron las primeras polvaredas en la Alcazaba, signo inequívoco de que el público está bailando y pasándolo bien.

El cuarteto formado por Boba, Luis Rodríguez, César Verdú y Eduardo Baos sirvió para calentar motores y dejar el ambiente a punto para Lori Meyers. Los granadinos reunieron el mayor número de fans durante su actuación, en la que repasaron los grandes éxitos de la banda después de casi 18 años de carrera musical con Luciérnagas y mariposas, Tokio ya no nos quiere, Emborracharme, Alta fidelidad y ofrecieron en primicia uno de los temas que incluirán en su próximo trabajo discográfico que prevén vea la luz después de verano. Cerraron como no podía ser otra manera con el que se ha convertido ya en un himno para terminar sus conciertos, Mi realidad.

Pasadas las dos de la mañana fue el turno del dúo The Bright, un concierto que a pesar de las hora y el frío que empezó a sentirse a esa hora tiene pegada suficiente para subir la temperatura. Miryam Gutiérrez y Aníbal Sánchez mantuvieron el tipo sobre el escenario en un concierto maduro que mostró la evolución de su música folk rock desde su último trabajo.

Cerraron la jornada la banda murciana Perro que dejó toda su rabia sobre el escenario, ---sin duda otro de los regalos de la noche-, Sonic Toys y el dj extremeño Milleiro.

A falta de conocer los datos de asistencia oficiales, Contempopránea cierra su tercera edición en Badajoz con la misma incertidumbre de todos los aos sobre su continuidad en la capital pacense.