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Usuarios del parque canino de Mejostilla, ayer reunidos con Luis Salaya. :: armando méndez
Las quejas vecinales por ruido motivan la reducción del parque canino de Mejostilla

Las quejas vecinales por ruido motivan la reducción del parque canino de Mejostilla

Los usuarios del recinto piden al Ayuntamiento que instale fuentes, papeleras, más bancos y que plante árboles

M. J. T.

CÁCERES.

Jueves, 13 de septiembre 2018, 07:40

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La intervención por sorpresa en el área canina de Mejostilla, situada entre el Residencial Ronda y la calle Gonzalo Mingo, ha puesto en pie de guerra a sus usuarios. El martes se reunieron para protestar por la reducción de la superficie destinada a las mascotas dentro de este recinto, donde se ha empezado a colocar una valla para dividir en dos el espacio. Y ayer mantuvieron en este mismo lugar una reunión con Luis Salaya, portavoz del grupo municipal socialista, para trasladarle sus inquietudes.

Mientras tanto, el Ayuntamiento aclara que la intervención en esta zona canina está motivada por las quejas vecinales recibidas debido al ruido. Ante esta situación, el Consistorio ha decidido «reordenar» la parcela. Cambiará el acceso al recinto y reubicará los bancos, ya que una de las zonas del parque está próxima a bloques de viviendas. Al cambiar la entrada y la zona de descanso, según explica el Consistorio, se favorece la convivencia, ya que se deja más distancia entre los bancos y las casas.

Esta actuación ha llevado a los usuarios habituales del recinto a reclamar al Ayuntamiento que mejore las dotaciones. «Queremos un parque canino digno, como el que hay, por ejemplo, en Villanueva de la Serena», indica Ana Bermejo. Ella ha traslado al Ayuntamiento su propuesta a través del buzón de quejas y sugerencias.

La movilización también ha llegado a las redes sociales. En 'Facebook' los usuarios han creado un grupo llamado 'Dueños de mascotas por un parque habilitado', donde exponen sus reivindicaciones. «La finalidad de este grupo es conseguir un parque realmente habilitado para perros. No pedimos lujos, solo un terreno decente, bien vallado, con sombra, fuente, papeleras y bancos. No queremos escombreras como hasta el momento nos estamos encontrando», señalan. Y, a continuación, añaden que no les importa si el Ayuntamiento les proporciona una ubicación distinta a la actual. «Nos da igual la zona, pero que verdaderamente esté acondicionado para perros y dueños», concluyen.

Tras la reunión con Salaya, los usuarios del parque quieren concertar una cita con el Gobierno local.

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