Muere Gonzalo Marcos Gómez, cardiólogo del hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres

El ámbito de la sanidad extremeña despide al cardiólogo clínico Gonzalo Marcos Gómez, que falleció anoche en la capital cacereña. Marcos Gómez, de 62 años, desarrolló toda su vida profesional en el hospital San Pedro de Alcántara de la capital cacereña. Allí fue jefe de servicio durante cinco años, desde 2007 hasta 2013. Fue también director de la unidad de imagen cardíaca durante 30 años, una sección especializada en la realización de pruebas de imagen del corazón para diagnosticar y monitorizar enfermedades.

Este médico, nacido en Badajoz, se formó en la Facultad de Medicina de la Universidad de Extremadura entre los años 1980 y 1986 y realizó el MIR en el Instituto de Cardiología de Madrid. Llevó a cabo su formación complementaria como residente de cardiología en la Clínica de la Concepción, en el Hospital de la Princesa, Hospital La Paz y Hospital General Universitario Gregorio Marañón, todos ellos de Madrid. Antes había trabajado como médico de Urgencias en el hospital militar de Badajoz.

Su curiosidad y ganas de aprender le hicieron llevar a cabo un máster en cuidados cardiacos agudos en la Universidad Menéndez Pelayo entre 2018 y 2019. Además de su trabajo en la sanidad pública atendía en su clínica privada en la capital cacereña. Pacientes y compañeros destacaban ayer su profesionalidad y empatía con los enfermos, su trato cercano y accesible.

La junta directiva del Colegio de Médicos de Cáceres envió a su familia sus condolencias y destacó ayer en un comunicado que este médico fue «muy querido por gran parte de la colegiación y un referente en el ámbito de la salud de nuestra ciudad. Su estrecha colaboración con las actividades formativas del Colegio, su compromiso con la profesión y su cercanía lo convirtieron en una figura muy valorada dentro de nuestra comunidad médica». Subrayó también que «a lo largo de su trayectoria, destacó no solo por su labor médica, sino también por su calidad humana, su generosidad y su incansable vocación por el bienestar de sus pacientes y colegas».

El exconsejero de Sanidad, José María Vergeles, lamentaba este martes la pérdida de este facultativo, con quien mantuvo una relación larga y que propició la colaboración entre Cardiología y Medicina de Familia. Además de su valía como profesional Vergeles apuntaba que «lo mejor era su cultura y su personalidad», tal y como publicaba en redes sociales.

Sus pompas fúnebres están instaladas en el Tanatorio San Pedro de Alcántara y su funeral tendrá lugar este miércoles a las 10.30 en este mismo espacio.

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