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Maite Mulió Sánchez, presidenta de la asociación Hikari Reiki. :: l. c.
«Nos gustaría hacer sesiones en la Casa de la Mujer y en el Hospital San Pedro de Alcántara»

«Nos gustaría hacer sesiones en la Casa de la Mujer y en el Hospital San Pedro de Alcántara»

A. RUBIO

CÁCERES.

Domingo, 15 de abril 2018, 09:11

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Antes de que el Reiki llegara Cáceres, está técnica ya lo había hecho en otras partes del mundo con mucha más fuerza. Desde Japón, se ha extendido por numerosos rincones del Planeta. De hecho, en varias ciudades de España se llevan a cabo sesiones en centros hospitalarios públicos. También desde hace cinco años en el Hospital Infanta Cristina de Badajoz lo utilizan con pacientes oncológicos. «Siempre de una forma complementaria, tal y como lo reconoce la Organización Mundial de la Salud. En ningún caso, hablamos de sustituir el tratamiento de la medicina general. Es compatible con todo tipo de medicación y para todas las edades», matiza Maite Mulió, presidenta de la asociación Hikari Reiki.

En el caso de Cáceres, además de implantarse en el centro del mayor de la Plaza, también se ha impartido en la Asociación Contra el Cáncer. Ahora, el objetivo de la agrupación es poner en marcha un voluntariado en el Hospital San Pedro de Alcántara y en la Casa de la Mujer.

«Por el momento no tenemos suficientes voluntarios en la ciudad para abarcar todos esos espacios», lamenta Maite, quien anima a todos aquellos cacereños interesados en esta técnica a contactar con la asociación.

Actualmente cuentan con un grupo formado por 15 voluntarios pero realmente están en activo siete. La mayoría son mujeres que rondan los 40 años de edad. Casi todas trabajan en el ámbito de la sanidad y lo social. La mayoría son psicólogas, enfermeras y profesoras. Ellas aportan 15 euros anuales con los que sufragan los gastos de esta asociación.

Para impartir Reiki es necesario contar con una formación específica. El primer nivel se consigue de manera intensiva en un día. Luego hay que esperar tres semanas para poder ofrecer la primera sesión. «Se podría decir que es el tiempo que tarda nuestro cuerpo en gestionar lo aprendido», detalla Maite, quien apunta que se rige por las directrices de la Federación Española de Reiki, que es el organismo con más rigor y seriedad que existe actualmente.

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