El Gobierno construirá un nuevo trasvase desde Alcántara a Cáceres para solucionar el problema del agua

El Ayuntamiento de Cáceres espera confirmar de forma oficial en las próximas semanas que el abastecimiento de agua de la ciudad está garantizado con una solución definitiva: un nuevo travase desde el pantano de Alcántará que costará 10 millones de euros, aportados por el Gobierno central.

Se trata de uno de los grandes asuntos pendientes en la ciudad desde hace décadas. El último proyecto que había sobre la mesa era el de trasvasar agua desde el embalse de Santa María en Portaje hasta el Guadiloba. La obra comenzó en 2007 y en 2011 el presupuesto sumaba 49 millones de euros. Poco después se requirió un complementario que disparaba lo costes en otros 10 millones más. La empresa adjudicataria, Sando-Befesa, pidió en 2019 la resolución del contrato, un expediente que ya se está tramitando. De hecho, la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) ya informó de que esa actuación se encontraba en suspensión temporal total.

El organismo regulador de cuenca y el Ministerio para la Transición Ecológica ya tienen una «solución alternativa» sobre la mesa. Se trata del proyecto de 'Reubicación y ampliación de la captación, en el embalse de Alcántara, propia del abastecimiento a la ciudad de Cáceres'. En otras palabras, lo que se pretende con esa «solución alternativa», tal y como ha confirmado a HOY el Ministerio para la Transición Ecológica, es trasladar la actual toma de captación del Almonte aguas arriba y al mismo tiempo multiplicar su capacidad. Para ello, se requerirá una inversión que ronda los 10 millones de euros, indica el Gobierno central.

Faltan aún los detalles más técnicos y la rúbrica, pero la apuesta es decidida y así se ha abordado en las reuniones que han mantenido diputados socialistas con la administración central así como los propios responsables del Ministerio con el Ayuntamiento. El pasado 4 de junio ya se perfiló un encuentro con la Secretaría General del Agua y la Dirección General del Agua.

El jueves, el diputado socialista por Cáceres César Ramos dio un avance, sin entrar en detalles, de la reunión que había mantenido con su compañera y secretaria general del PSOE en Cáceres, Belén Fernández, con el presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo y el director general del Agua. Ramos publicó una foto de la reunión en las redes sociales y fue explícito:«Hemos avanzado en la solución definitiva al abastecimiento de Cáceres. Algo que se anunciará y detallará próximamente».

En conversación con este diario, el diputado socialista no quiso hacer declaraciones ni valoraciones técnicas, ya que será el propio Luis Salaya quien anunciará en próximas fechas, sugiere, el proyecto alternativo. Se considera una solución viable técnicamente, que asegura el suministro a los cacereños y que cuenta con ventajas adicionales. Una de ellas, según corrobora el Ministerio para la Transición Ecológica, es que no habrá una renuncia total a Portaje. Políticamente tendría difícil explicación que 13 años y más de 50 millones después el trasvase desde la localidad cacereña hasta el Guadiloba se 'enterrase'. La obra lleva años parada por la dificultad de salvar los ríos Tajo y Almonte. Con la nueva alternativa, se mejora y potencia la captación aguas arriba y se «aprovecha parte de lo ya ejecutado» con Portaje, matiza Transición Ecológica. La CHT supervisa la iniciativa, de la que se ha mantenido informado en todo momento el alcalde, Luis Salaya, que ya defendió en la oposición la idea de dar protagonismo a los técnicos de la Universidad de Extremadura.

La solución, según el Gobierno, se incluye «en el marco de la elaboración de los planes hidrológicos del siguiente ciclo de planificación» de la CHT. Consultado al respecto, en una entrevista con HOY el pasado fin de semana, el alcalde ya avanzó algunos aspectos como situar la toma «más dentro del pantano», además de «cambiar también las bombas para poder aumentar el volumen de trasvase».