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Así estaba el salón anexo a la cafetería de la Ciudad Deportiva, ayer por la tarde. :: ARMANDO MÉNDEZ

Baile masivo en la Ciudad Deportiva de Cáceres

El salón de la cafetería del recinto se transforma el último domingo de cada mes en una gran pista con música en directo, donde se dan cita más de 200 mayores

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Lunes, 25 de febrero 2019, 07:55

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Domingo, cinco de la tarde. Ciudad Deportiva de Cáceres. El ambiente en el recinto es muy diferente al habitual. No suenan pelotas de tenis que impactan contra raquetas, ni hay lanzamientos a portería. Aquí hoy lo que manda es el pasodoble y las canciones del Dúo Dinámico.

El salón de la cafetería de este espacio deportivo, que depende de la Junta de Extremadura, se transforma el último domingo de cada mes en una gran pista de baile, con música en directo durante tres horas ininterrumpidas. No siempre ha sido así. La jornada de ayer, de hecho, fue la tercera tras la celebrada en diciembre y la de enero.

Se trata de una decisión adoptada por el ejecutivo autonómico después de que un grupo del colectivo de mayores de bailes de Cáceres se reuniera con Guillermo Fernández Vara, presidente de la Junta de Extremadura, y le trasladara personalmente su malestar por el estado en el que se encontraban los salones del hogar de mayores de la Plaza y de la residencia Cervantes, los dos centros donde se celebra de forma habitual el baile semanal de los domingos de manera alterna. También se quejan de sus reducidas dimensiones.

Los usuarios solicitan un espacio más grande, que puedan utilizar todas las semanas

Juan José Criado y Ángel Sánchez encabezaron, entre otros, esta particular revuelta para conseguir un lugar más digno. Y, además, con música en directo. «Pedimos al señor Fernández Vara un local lo suficientemente grande con capacidad para todos. Y hemos conseguido esto», explica Criado. Aunque la situación ha mejorado, no es la ideal, señalan. «Aquí el aforo se nos queda pequeño», añade. Cuentan que de forma habitual suelen juntarse más de 200 personas.

Lo que reclaman es un espacio todavía más grande y que los bailes no solo sean el último domingo de cada mes, sino todos los domingos. Ahora tienen que seguir yendo a los hogares de mayores si quieren bailar el resto del mes. «Pero es que allí estamos como sardinas en lata, tanto es así que incumplían la normativa de seguridad», subraya Juan José.

Antonio Pizarro: «El baile es una terapia buenísima; ya lo dicen los médicos»

Agustín, que conoció a su actual pareja en una pista de baile, prefiere irse fuera cuando no hay baile en la Ciudad Deportiva y toca ir al hogar de la Plaza Mayor. Pone rumbo, cuenta, a Mérida. «El hogar de la Plaza no reúne condiciones para bailar. Sirve para echar la partida o tomar un café, pero no para bailar», dice.

Grupo de mayores que ha promovido las reivindicaciones:: A. MÉNDEZ
Grupo de mayores que ha promovido las reivindicaciones:: A. MÉNDEZ

El colectivo se muestra muy agradecido con Cristina Lancho, directora territorial del Sepad (Servicio extremeño de promoción de la autonomía personal y atención a la dependencia), por las gestiones realizadas hasta ahora. A Juan José y a Ángel les han transmitido que hay un proyecto de la Junta para hacer un salón de baile nuevo en el hogar de mayores de la avenida de Cervantes, bien ampliando el actual o construyendo un edificio anexo. Sin embargo, ellos se muestran prudentes y un tanto escépticos. «Hasta que no lo veamos...».

El proyecto municipal

La reivindicación de este colectivo de mayores coincide con las obras que el Ayuntamiento está realizando en la calle Margallo para construir junto a la Casa del Mayor un salón de baile con una inversión de 161.976 euros. Ángel Sánchez es muy crítico con el Consistorio. Este nuevo espacio, detalla, también es pequeño. Y enseña todos los escritos dirigidos al Ayuntamiento para los que no ha obtenido respuesta.

«Le pregunté al arquitecto de esta obra por el aforo del local y me dijo que era para noventa y tantas personas. Se va a quedar pequeño porque no va a reunir las condiciones para el baile», indica Antonio Pizarro sobre la obra municipal. Es miembro del hogar de mayores de la Plaza y muy aficionado al baile. «Me encanta. Es una terapia buenísima, ya lo dicen los médicos», zanja.

«Cáceres es una ciudad bastante aburrida. Llega el fin de semana y ¿qué haces? Aquí venimos a bailar y pasamos la tarde», ilustra Pilar Martínez. «El baile es un ejercicio muy completo», concluye entre una canción y otra.

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