El Ayuntamiento y los veterinarios buscan remedios contra las palomas en el casco antiguo

Los asistentes a la reunión acordaron colaborar para tratar de poner remedio a una sobrepoblación que, según indica en una nota el Colegio de Veterinarios, «afecta al medio ambiente urbano y tiene repercusiones sobre la salud pública y el bienestar animal», además de poner en peligro la conservación de elementos patrimoniales de la ciudad, en especial la muralla.

En la reunión, que fue una primera toma de contacto y donde no se anunciaron actuaciones concretas, estuvo también presente el veterinario afincado en Cádiz Federico Villaplana Valverde, que cuenta con una dilatada experiencia clínica en pequeños animales y ha puesto en marcha campañas de gestión de animales en entornos urbanos que, según el Colegio de Veterinarios, pueden servir de modelo para la ciudad de Cáceres.

La anterior alcaldesa, Elena Nevado, ya efectuó en octubre del año pasado un llamamiento para que no se alimente en el casco urbano a las palomas, a las que llamó «ratas voladoras». Lo hizo después de que los usuarios del hogar de mayores de la Plaza Mayor pidieran al Ayuntamiento que tomase medidas contra estas aves, hartos de la suciedad que dejan en las ventanas y cornisas del hogar, que a veces se cuela también en el interior del edificio.

La petición fue respaldada por otros colectivos, como la asociación de vecinos de la Ciudad Monumental, comerciantes y hosteleros de la zona.