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Tubos pendientes de ser utilizados desde hace años cerca del río Almonte. :: l. cordero
La obra del trasvase solo ha avanzado un 2,5% en dos años

La obra del trasvase solo ha avanzado un 2,5% en dos años

Medio Ambiente y la Confederación del Tajo confirman nuevos retrasos a la espera de encontrar solución al paso de los ríos y al suministro eléctrico

Manuel M. Núñez

Jueves, 17 de septiembre 2015, 07:01

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Octubre de 2013. El secretario de Estado de Medio Ambiente tomó la palabra en el Senado y lo anunció: la obra del trasvase estaría concluida en 2014. «El Ministerio es plenamente consciente de la importancia de estas obras, que se declararon de interés general. Se ha comprometido a finalizarlas, y así lo haremos en el año 2014», se comprometió el alto cargo. Solo unos meses después, en abril, el propio departamento de Medio Ambiente reiteró ese compromiso. La obra principal para mejorar el abastecimiento de Cáceres finalizaría antes del 31 de diciembre del año pasado. No se cumplió.

LOS DETALLES

  • uEl proyecto. Arrancó en 2007 con una duración estimada de 18 meses. Conecta el pantano de Portaje con el Guadiloba para mejorar el abastecimiento de Cáceres.

  • uConducción. 72 kilómetros de tuberías. Se han instalado 68.

  • uEjecución. Al 85% en la actualidad. Estaba al 78% a finales de 2012. Al 82,5% en agosto de 2013. 2017 es la última fecha barajada para su conclusión.

El entonces secretario de Estado, Federico Ramos de Armas, ya no ocupa el cargo tras haber sido nombrado subsecretario de Presidencia. En Medio Ambiente confirman lo que ya se intuía tras conocerse los presupuestos generales del Estado (PGE) para 2016. La conclusión del trasvase vuelve a retrasarse. Esta vez hasta 2017. HOY lo adelantó el pasado 6 de agosto.

«El plazo de finalización previsto es, según los PGE, 2017», corrobora también ahora la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), a preguntas de este diario. Los retrasos se han convertido en un nota característica, posiblemente la más llamativa, de un proyecto que arrancó con la primera piedra en 2007.

Va a necesitar una década para completarse, lo que da idea de las deficiencias con las que se planteó y del escaso nivel de respuesta que han tenido éstas. Los técnicos han llegado a valorar la conveniencia de abandonar. Sin embargo, la versión oficial es que la obra sigue adelante y con el objetivo de completarse. Pese a todo, los datos son elocuentes. En los dos últimos años apenas ha avanzado un 2,5 por ciento. Así se constata en la comparativa de las informaciones que ha facilitado la CHT.

En agosto de 2013 los trabajos estaban al 82,5 por ciento. En la actualidad se encuentran al 85. Hay instalados 68 kilómetros de tuberías de los 72 previstos, pero no se ve solución, por ahora, para dos cuestiones clave: atravesar los ríos Tajo y Almonte y resolver «el problema de suministro eléctrico de todas las instalaciones». «Temas ambos sobre los que se sigue trabajando intensamente», puntualizan desde el organismo regulador de cuenca. Mientras no se dé respuesta a ambas cuestiones tampoco se podrá contratar un complementario de 10,2 millones que salió a información pública en 2012.

«El Ministerio continúa trabajando en encontrar una solución técnica respecto a la tubería de abastecimiento y al suministro de energía eléctrica», admiten desde Medio Ambiente.

Compromiso

Eso sí, la partida de 9,1 millones que recogen los presupuestos de 2016 y la de 4,2 millones en la proyección de 2017 no se interpretan como un dato negativo. Todo lo contrario. Ello «demuestra el compromiso del Ministerio de Medio Ambiente con este proyecto».

El cartel informativo que se colocó en el Guadiloba habla de 18 meses de duración. Han pasado 96, y aún falta. Se podrían haber terminado más de cinco trasvases en este tiempo.

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