Vecinos del Casco Antiguo de Badajoz piden un plan antidelincuencia tras la agresión a un niño

La agresión a un menor ha motivado una campaña espontánea, organizada por los propios, para reunir firmas. En un escrito dirigido a la Delegación del Gobierno en Extremadura, que tiene las competencias en materia de seguridad, los vecinos piden «más medios para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, más agentes en las calles, más decisión en las actuaciones y más constancia en la lucha por recuperar la normalidad en nuestras calles».

«La situación en nuestras calles comienza a ser alarmante. La degradación provocada por el excesivo menudeo, hostigamiento de toxicómanos, hurtos, usurpaciones de propiedades, agresiones, desórdenes en la conducta y un largo etcétera de ilícitos, todo ello derivado principalmente del tráfico de drogas y el entorno que genera, está suponiendo un castigo para residentes, visitantes, trabajadores y empresarios del barrio», indican en el escrito los vecinos que añaden que los empresarios también se están viendo afectados por la degradación del barrio. «La convivencia en estas calles se está deteriorando a pasos agigantados, los negocios se resienten por la pérdida de clientes, nuestras propiedades se devalúan, nuestras familias tienen miedo. A todo lo anterior no ha puesto remedio jamás una operación puntual, como viene siendo la tónica habitual cuando nuestras quejas trascienden a los medios de comunicación».

HOY ha pedido a la Delegación del Gobierno una reacción tras la agresión a un menor que fue denunciada por su familia con un parte médico, pero el delegado del Gobierno en Extremadura no ha querido valorar la situación.

Desde SOS Casco Antiguo creen que el plan contra la delincuencia debe surgir de la Delegación del Gobierno, aunque se coordine con otras administraciones. Esto ha ocurrido, dice Pacheco, «a pesar de nuestro mensaje machacón sobre la seguridad en nuestras calles y tan olvidada principalmente por la Delegación del Gobierno que es quien tiene las competencias primordiales en seguridad urbana»

«El Casco Antiguo es de todos y a todos interesa su recuperación. Todos sabemos perfectamente cómo está en cuanto a la venta de droga, el acoso y atosigamiento de los toxicómanos que están haciendo un daño horrible no solo a los residentes, sino también a los empresarios porque alejan a la clientela. Hay hurtos, robos de estas personas que no dejan de ser enfermos», añade.

El portavoz de SOS Casco Antiguo señala ejemplos de ciudades en las que se ha logrado cortar la delincuencia en las zonas históricas. «La Alameda de Hércules en Sevilla era una zona en que apenas se podía acceder y ahora es un lugar bohemio, pero recuperado. Lo mismo ocurrió en las calles cercanas a Larios, en Málaga».

«Debería ser interés de todos, con una sola voz, acudir a la Delegación del Gobierno a pedirle que se siente con el Ayuntamiento y tracen un plan coordinado que sea constante, no valen operaciones puntuales cuando hay ruido mediático. Que hagan lo mismo que se ha hecho en muchas ciudades y pueblos de la geografía española«.

Para Pacheco en Badajoz se ha creado lo que consideran un «corredor seguro» en el eje desde la plaza Minayo o Menacho hasta la plaza Alta «partiendo en dos las zonas marginales». Sin embargo, además de concentrarse la inseguridad en las otras calles del Casco Antiguo, la marginalidad está volviendo a las vías principales. «Incluso las zonas que estaban recuperadas se están degradando».

Prueba de ello, indica este vecino, son las «señales de alarma» como las personas sintecho, «que no quieren ayuda» y duermen habitualmente en San Francisco, el pasaje de Menacho, puerta Trinidad, el cauce del Rivillas.

Por tanto piden un plan coordinado entre administraciones «que devuelva la normalidad a estas calles». «Todos los días se cometen ilícitos en este barrio y es el origen de todo el mal. Si Delegación del Gobierno no tiene la capacidad para enfrentarse a este reto, por favor, que den un paso al lado y dejen a quien sí tienen lo suficiente para enfrentarse a este mal», concluye Pacheco.