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Los jóvenes tuvieron una serie de charlas en la Diputación de Badajoz dentro del programa. :: hoy
Talento extremeño de ida y vuelta

Talento extremeño de ida y vuelta

Todos los becados poseen titulación universitaria, aunque proceden de diversos ámbitos, y dominan varios idiomas Trece jóvenes desempleados de la región se formarán durante cinco meses en instituciones europeas

JOSÉ M. MARTÍN

BADAJOZ.

Martes, 10 de diciembre 2019, 07:57

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Una estancia profesional en instituciones europeas para regresar a Extremadura y poder aplicar en su tierra los conocimientos adquiridos. Esa es la premisa con la que nacen las becas Europa de las que se beneficiaron, en un primer momento, 16 jóvenes de la región.

Todos ellos estaban en situación de desempleo y tenían menos de 35 años en el momento de la solicitud. Como algunos han encontrado trabajo durante el proceso, finalmente serán 13 los becados. En común, que cuentan con estudios universitarios, aunque sus perfiles son muy diferentes.

Uno de los requisitos para optar a este programa era un elevado conocimiento de idiomas extranjeros. El objetivo es hacer más sencilla y completa la inmersión durante los cinco meses que durará la estancia en Bruselas. «Entiendo el francés, pero yo hablo en inglés», explica por teléfono María del Carmen Valverde, que lleva apenas una semana en la capital belga.

LOS BECARIOSMª Carmen Valverde 23 años«Vivir aquí es una forma estupenda de conocer otras culturas» Rafael García Galeano 35 años «Trataré con parlamentarios europeos, es algo que no podía rechazar» Las entidades en las que harán las prácticas están en Bruselas o en su entorno cercano

Su nivel formativo se ajusta perfectamente a las exigencias de la beca. Estudió Traducción e Interpretación en inglés y alemán, el postgrado de Formación del Profesorado y actualmente cursa Derecho en la Uned. Está desarrollando sus prácticas en el bufete de abogados Exel Legal. «Me gusta mucho la traducción jurídica», reconoce esta joven de 23 años.

María del Carmen es una de las beneficiarios ya se han incorporado a su entidad de destino, pero otros seis empezarán su estancia en el extranjero con el comienzo del año. «Todos tienen localizadas sus entidades y no ha diferencia de tiempo, desde que se incorporan son cinco meses», informa Antonio Rodríguez, técnico del área de Desarrollo Rural de la Diputación de Badajoz, que es el encargado de la dirección del programa de becas Europa. Es la institución provincial la responsable de este programa de prácticas de alto rendimiento.

El Instituto Cervantes, la Cámara de España en Bruselas, la embajada o asociaciones de científicos son otras de las opciones que han elegido los jóvenes. Siempre ubicadas en Bruselas o en su entorno más próximo. La idea es que sean centros que se ajusten a la formación y los intereses de los becarios. «Me hicieron una entrevista similar a una entrevista de trabajo y me ofrecieron varias posibilidades», ejemplifica Rafael García Galeano, que se decantó por Water Europe, una asociación internacional sin ánimo de lucro que trabaja por poner en práctica las directrices europeas relacionadas con el uso del agua. «La idea es crear conciencia sobre la importancia de hacer un aprovechamiento inteligente de este recurso», añade este pacense de 35 años al que le han encargado la tarea de captar la atención de los eurodiputados en este sentido. «La verdad es que me dieron una gran alegría con esta tarea», apostilla.

La selección de las entidades de destino se hizo a través de Finnova, una fundación con sede en Bruselas, entre otros lugares. La Diputación recurrió a esta entidad, que se comprometió a prestar apoyo constante a los becarios durante su estancia, para gestionar sobre el terreno y de manera más sencilla la inmersión de los jóvenes pacenses. «Están todos muy contentos; es lo que nos han transmitido hasta el momento respecto a los lugares en los que se han incorporado, porque son entidades acordes a sus preferencias», apunta Rodríguez.

1.500 euros al mes

La dotación económica que reciben los becarios es de 1.500 euros mensuales, que aporta la institución provincial. Sin embargo, el dinero no es lo que ha movido a los beneficiarios a sumarse al programa. «Yo tenía una oferta para trabajar en el consulado de España en Italia», apunta Rafael, que ya estuvo en este mismo organismo en Nueva York. «Siempre he querido trabajar en temas de la Unión Europea y me pareció una oportunidad que no podía rechazar», insiste este joven que ha tenido varias experiencias en el extranjero. Antes de cursar Filología Inglesa en Salamanca, hizo Relaciones Internacionales en Nottingham y tiene conocimientos, en diferentes niveles, de inglés, italiano y portugués, idioma que precisamente estaba estudiando cuando tuvo conocimiento de las becas Europa.

En la misma línea, María del Carmen reconoce que le llamó mucho la atención la posibilidad de completar su formación en el ámbito profesional fuera de España y de moverse en un ambiente diferente. «Bruselas es el centro de Europa y aquí vive gente de muchos países, yo lo hago con otras once personas, que son de Italia, Panamá, Líbano, Inglaterra... es una forma estupenda de conocer otras culturas», remarca esta joven de Valverde de Leganés.

Y es que, aunque reciben la orientación de Finnova, son los propios becarios los que deben hacer todos los trámites relacionados con su estancia en Bruselas, ya sean de alojamiento o transporte.

Pruebas

Más allá de cumplir con los requisitos, los jóvenes que optaban a las becas tuvieron que superar un examen. Además, antes de elegir destino, acudieron a la sede de la Diputación para conocer el funcionamiento de la institución y recibir unas sesiones de asesoramiento sobre el programa.

La estancia en Bruselas se plantea para que puedan profundizar en el conocimiento de los fondos y los programas europeos. Miguel Ángel Gallardo, presidente de la Diputación, transmitió a los jóvenes que la iniciativa pretende que «adquieran más competencias y cuando regresen puedan generar su idea de negocio y verter su talento en nuestra tierra».

A finalizar las estancias, los becados deben presentar una memoria. Por ahora, es un momento que ven lejos. «Me gustaría buscar más prácticas cuando esto acabe», afirma María del Carmen. «Ojalá pueda quedarme un tiempo más aquí, estaría bien que se pudiera ampliar la duración de la estancia», concluye Rafael.

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