El plástico es el material que más se encuentra entre la basura del Guadiana

Envases de comida, unas sandalias, tapones, botellas de refresco, un táper, compresas y muchas bolsas de la compra. Son solo algunos de los objetos que se encontraron ayer los 200 voluntarios que limpiaron las orillas del Guadiana a su paso por Badajoz. En las márgenes se puede encontrar prácticamente de todo, pero el material que más predomina es el plástico.

La iniciativa fue de la Consejería de Medio Ambiente, que ya había organizado una limpieza similar en el embalse de Proserpina. «La naturaleza no puede con todas tus huellas» fue el lema de la Jornada medioambiental de recogida de residuos y puesta en valor del patrimonio natural de Badajoz. El proyecto contó con el patrocinio de Coca-Cola European Partners y con la colaboración del Ayuntamiento de Badajoz.

Además de la recogida de basura, la jornada ofreció otras actividades como el avistamiento de aves, talleres para niños y un desayuno a base de migas. Para finalizar la mañana se liberaron aves procedentes del Centro de Recuperación Los Hornos y se realizó un homenaje a los efectivos de la UME (Unidad Militar de Emergencias) que están retirando el camalote del río. Además, la plataforma Salvemos el Guadiana les entregó una placa reconociendo su esfuerzo.

A la limpieza del río acudieron varios efectivos de la UME para colaborar. Por un día cambiaron la recogida de camalote por la de basura. Además, charlaron con los vecinos sobre cómo realizan su trabajo diario, el buen ritmo que llevan en la eliminación de la planta invasora y otros proyectos que están desarrollando. Por ejemplo, indicaron que, paralelamente a la recogida de camalote, están realizando un estudio de lodos en la zona que podría ayudar a eliminar este problema con más facilidad en el futuro.

Junto a los efectivos de la UME también acudieron agentes del Seprona. Sin embargo, el grueso del grupo estuvo compuesto por familias con niños pequeños que aprovecharon la mañana para colaborar, pero también para que los menores aprendiesen. Fue el caso de Ana Álvarez que acudió junto a su hija Iria. «Es la primera vez que hacemos algo así. A mi me gusta llevarla a todo tipo de actividades y que esté en contacto con el medioambiente. Yo soy bióloga y es algo que me interesa. Quiero que ella sea consciente de lo que tenemos y que sea respetuosa», indicó Álvarez.

Entre los participantes, todos con guantes, se repartieron bolsas verdes, azules, amarillas y negras para separar los distintos residuos. Además, varios voluntarios llevaban tablillas para ir marcando el tipo de basuras. Los contenedores de plástico, con diferencia, fueron los primeros en llenarse. Los niños también ayudaron. Recogieron los residuos menos peligrosos, como los tapones, y llevaban sus propias tablas para apuntar lo que encontraban.

José Manuel Guzmán fue otro de los voluntarios. «La verdad es que hay muchísimas basuras, sobre todo plástico, y tenemos que hacer algo».

Durante el trayecto se hicieron varias paradas para aprovechar y avistar aves. José Manuel Guzmán, de la escuela Geo2, explicó a los voluntarios que en el tramo del Guadiana a su paso por Badajoz hay 180 especies distintas. «Dos más que las que se encuentran en Monfragüe», destacó.

A los niños les llamaron la atención los cormoranes que se posaban en las plantas y estiraban sus alas. «Lo hacen para elevar su temperatura corporal y hacer la digestión», les explicaron.