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La casa ocupada está a pie de la autopista, a la altura del cruce entre Pardaleras y Cerro de Reyes. :: c. m.
Pardaleras denuncia que hay okupas en una de las casas afectadas por la riada

Pardaleras denuncia que hay okupas en una de las casas afectadas por la riada

Los vecinos creen que, además de vivir ahí, el inmueble se utiliza como fumadero de droga por el continuo trasiego de gente que lo frecuenta

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Domingo, 8 de octubre 2017, 09:01

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Los vecinos de Pardaleras están en alerta, sus peores augurios se han cumplido. Una de las casas afectadas por la riada ha sido tomada por okupas. Se trata del inmueble de dos alturas que está a pie de autovía, en el cruce entre Pardaleras y el Cerro de Reyes. Desde hace tiempo, el colectivo vecinal viene reclamando que se acelere el proceso para que puedan derribarse las casas que aún están en pie antes de que fueran ocupadas ilegalmente.

Y no solo eso, varios vecinos de las viviendas que en su día se hicieron precisamente para realojar a los afectados por aquella trágica madrugada del 6 de noviembre de 1997, sospechan que la casa también sirve de fumadero de drogas. Desde sus ventanas ven un trasiego constante de gente que entra y sale. «Llegan, aparcan, suben y al rato salen, sobre todo por la noche y casi todo son chicos», relata una de las vecinas.

El rastro de los okupas es fácilmente visible. En la terraza tienen un tendedero con ropa y en la parte trasera de la casa hay una montaña de basura -incluso han tirado muebles- que arrojan desde una ventana, tapada con una sábana.

Los residentes de la zona llevan años reclamando que se compren y se derriben estas casas

No saben exactamente cuánta gente vive allí, solo tienen identificado a un hombre de nacionalidad rumana, que conocen porque anteriormente ya ocupó otra de las viviendas de la misma manzana, que finalmente el Ayuntamiento derribó en el año 2012.

Los vecinos creen que la llegada de los okupas ha coincidido con el traslado del negocio de neumáticos que había junto al inmueble.

«Nos preocupa mucho. Esto pasa por tener viviendas vacías que están llamadas a su demolición desde del año 1997, que se dice pronto», manifiesta Juan José Martín, presidente de la asociación de vecinos de Pardaleras. «Esto puede tener un efecto llamada y una vez que entran, luego es muy difícil echarles», añade.

El colectivo ha pedido en varias ocasiones al Ayuntamiento y a los propietarios de los inmuebles que lleguen a un acuerdo en el precio de venta para que puedan ser derruidas y acabar ya con un problema que el próximo mes cumplirá dos décadas.

Martín explica que haya algunos vecinos que consideren que el valor de sus terrenos es superior al precio que le ofrece el Consistorio, por lo que ha propuesto que sea un tribunal de justiprecio quien decida la cotización de las viviendas.

El representante de los vecinos de Pardaleras ya ha acudido al Ayuntamiento para informar de la ocupación ilegal. «He dado aviso a Vivienda y me han dicho que iban a avisar a la Policía», cuenta.

Según Martín, sobre la casa afectada ya hay un acuerdo entre el Ayuntamiento y el propietario, pero de momento el Consistorio no puede disponer del inmueble para iniciar su demolición porque falta que se haga el cambio de titularidad en las escrituras.

Precisamente, en diciembre del año pasado, el Ayuntamiento aprobó el gasto de 250.000 euros para la compra de casas afectadas por la riada. Entre ellas el inmueble de Pardaleras que da a la avenida Juan Sebastián Elcano por valor de 195.378 euros. Más recientemente, se ha sabido que el Consistorio adquirirá otras tres propiedades afectadas, que se pagarán con el remanente del pasado año. El proceso de expropiación y derribo de las viviendas dañadas por la riada está siendo muy lento. En estas dos décadas, el municipio ha gastado más de 8 millones de euros para borrar las cicatrices de la riada.

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