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Participantes en la ruta ornitológica del sábado pasado. :: J. V. Arnelas
La ornitología  despierta en Badajoz

La ornitología despierta en Badajoz

En la escuela taller se forman guías de visitas y en las rutas programadas los fines de semana se llenan los grupos

A. GILGADO

BADAJOZ.

Lunes, 14 de octubre 2019, 08:07

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En el desagüe del Caya con el Guadiana cerca de la frontera. En la garita del Puente de Palmas. Bajo el puente de la Universidad. En el Canal de los Ayala de la carretera de Cáceres. Todo son chinchetas en el mapa para los ornitólogos.

Llega octubre y se programan rutas para ver de cerca a las migrantes. Entre el salto de agua frente al club de piragüismo y las Crispitas transita uno de los humedales urbanos más relevantes de España según la SEO Birdlife, que ya dio la alerta el año pasado por la invasión de patos en la orilla y de camalote en el agua. El equilibrio ambiental peligra y conviene actuar antes de romperlo.

Juan Pablo Prieto es ornitólogo y cree que para espantar las amenazas hay que mostrar la vida que se esconde en el río. «Si la gente lo conoce, lo respeta y lo cuida». Por eso defiende la ornitología. El Ayuntamiento ha editado una guía que ha diseñado Prieto explicando la fauna que depende del Guadiana y ha puesto en marcha un calendario de visitas guiadas para conocer mejor este tramo que desde 2004 cuenta con la protección ZEPA, la única urbana del país. La afición por observar a las aves, explica, ya no se ve como algo minoritario. «Viene mucha gente a las rutas. Un éxito».

Entre el azud del Guadiana y las Crispitas transita uno de los humedales urbanos más relevantes de España

Al tratarse de una actividad no invasiva sobre el ecosistema, barata porque bastan unos prismáticos y educativa y que se puede compartir en familia, en cada cita que programan llenan los grupos.

El estudio detallado de especies, cuenta, forma parte de un proyecto más amplio que presentaron al Ayuntamiento hace años. Su 'Badajoz ciudad de las aves' incluye también un festival de cine, concursos de pintura o fotografía, reuniones de expertos y observatorios repartidos por un radio de quince kilómetros. «Se trata de despertar el interés y de que los aficionados vean en Badajoz una ciudad de referencia en convivencia con estas especies».

La Concejalía de Turismo ya dijo hace tiempo que quieren enseñar el río a los visitantes. Por eso ha editado material explicativo o informan con detalle en la Oficina de Turismo sobre los puntos más interesantes según la hora y la estación del año.

Promocionar las Crispitas

En la Fitur de 2018 el alcalde habló del Plan Director de Turismo Ornitológico, un marco con actividades y eventos para los próximos cuatro años. Para Juan Pablo Prieto supone también una forma de promocionar el Guadiana como epicentro de la biodiversidad. «Se pueden ver colonias durante todo el año y eso no ocurre en otros humedales cercanos».

Ahora, por ejemplo, cualquiera puede toparse con las que bajan desde el norte de Europa a los cuarteles invernales del Sahel africano y aprovechan la comodidad que les aporta la balsa de agua. No todas cruzan el Estrecho, algunas permanecen cerca de la ciudad hasta que la nieve se derrite en los países escandinavos y suben de nuevo en primavera para criar allí.

Por eso recomienda en las tardes de otoño detenerse en cualquier garita del Puente de Palmas. Por esa zona -explica- vuelan a diario colonias que pasan el día en el entorno del Gévora. Aguas abajo, en la depuradora del azud, se avistan garcetas y moritos comunes, sobre todo en primavera. «Es un espectáculo».

En algunas islas interiores del azud también duermen cormoranes, aunque no durante todo el año. Y bajando en dirección Portugal destaca la variedad de especies que dormita en la antigua gravera de la conexión del río Caya con el Guadiana.

En este cruce abundan colonias de abejarucos y de avión zapador, una de las más cotizadas para los que se mueven con cámaras estilo réflex de objetivos telescópicos. Las islas interiores bajo el puente de la Universidad la pueblan los calamones, una gallineta grande de color azul metálico con el escudete rojo también muy buscada por los fotógrafos.

Entre los aficionados, explica Prieto, abundan naturalistas, expertos en fauna o iniciados que estudian biología o algún grado con asignaturas de ambientales y zoología. «Tener un campus de carreras relacionadas con la naturaleza es un extra porque se trata de gente joven muy interesada».

Para dar respuesta al creciente interés por el avistamiento de aves, la escuela taller ha incluido por primera vez un curso de guía ornitológico de Badajoz. Los alumnos han preparado material en castellano, inglés y portugués detallando ejemplares y lugares interesantes en el tramo urbano.

También han diseñado una ruta de algo más de dos kilómetros por el paseo de la margen izquierda, entre Puerta de Palmas y el Puente Real. Los alumnos buscan precisamente ofrecerse a los operadores turísticos que traen visitantes a la ciudad.

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